“La idea inicial era crear una agencia tributaria y aduanera que combata al contrabando y que sea completamente independiente”, contó Olmedo. En ese sentido, la DNIT recomendó al sector privado que en la propuesta legislativa incluyan a esta agencia dentro de la estructura de la Gerencia de Aduanas, principalmente porque las normativas vigentes le dan a la DNIT obligaciones y atribuciones de control de mercaderías.
La opinión de Aduanas tuvo como objetivo evitar que las normativas colisionen y por eso se abandonó la idea de una agencia independiente. Olmedo aclaró que Aduanas hace un tiempo creó un Departamento Anticontrabando, que sustituyó a la figura de la Coordinación Operativa de Investigación Aduanera (COIA). El trabajo de control anticontrabando ya se hacía, pero la intención es que se refuerce.
“Aduanas no tiene hoy las atribuciones necesarias para profundizar las operaciones de combate a este delito. Se busca que los agentes tengan una especialización tributaria y aduanera, que posean competencia para hacer controles, verificaciones, investigaciones y probablemente allanamientos”, reflexionó. El proyecto indica que el plantel que incorpore a la unidad ingrese por concurso y que pase pruebas técnicas y de actitudes diferentes.
Como Gobierno, la administración de Santiago Peña acompaña el proyecto de ley, aunque no se descarta que se puedan realizar algunas modificaciones para pulir la idea de esta agencia especializada. “Se podría incluir la cooperación de policías y militares con conocimientos específicos del tratamiento anti contrabando”, complementó Olmedo.
El ejemplo a seguir como modelo sería lo que es la Receita Federal del Brasil, que es un órgano especializado que combate el comercio y la importación ilícita de productos. No obstante, el mecanismo de funcionamiento tendría como referencia a los agentes de la Senad. A nivel mundial, países como Francia e Italia, cuentan con policías fiscales que obtienen buenos resultados en el control aduanero.
Según referentes del sector privado, el contrabando actualmente se está sumando a la suba del dólar y a la sequía como factores que están frenando el dinamismo económico y ejercen presión directa para que los precios finales de los productos estén cada vez más elevados. Este fin de mes la propuesta legislativa ya podría ser presentada al Congreso.