A la hora de emprender, ¿qué debe tener en cuenta una persona sobre el manejo del dinero?
El emprendedor tiene usualmente un problema de caja que es la mezcla del emprendimiento con su vida diaria. Al arrancar el emprendimiento es necesario un plan de negocios de tres partes: plan estratégico, plan operativo, y plan financiero. Ese plan es, generalmente, a 36 meses, pero tiene que estar bien detallado para los primeros seis meses, de forma tal que se pueda diferenciar cuál es el monto de inversión inicial que va a requerir y cuál es el monto de capital de giro.
¿Cómo se lleva eso a la práctica?
En ese capital de giro él tiene que tener en cuenta un salario propio, cuál va a ser el monto que va utilizar mensualmente para su propio gasto o de su familia, de forma tal que pueda asumir responsabilidades para su vida personal y familiar sin impactar negativamente en la posibilidad que tiene el negocio de poder cumplir también sus propias obligaciones.
Por otro lado, es importante que la empresa sepa con claridad cuánto puede tener como manejo de caja para asumir responsabilidades, por ejemplo, de compra de mercaderías, de insumos, de transformación y de salarios. Los primeros seis meses son como de gestación del emprendimiento.
¿Qué viene después de esos seis meses iniciales?
Hay 18 meses de volatilidad, donde el emprendimiento todavía está empezando a encontrar sus ciclos. En general todos los rubros tienen ciclos, entre los primeros seis meses de gestación y los 18 meses siguientes de incorporación al mercado. Tiene un poquito más de independencia a los dos años, porque ya se observa cuáles son los ciclos de ingreso, de pago, el origen y la aplicación de fondos. Es fundamental para el emprendedor un análisis bien objetivo de cuáles son los indicadores, conocer cuál es el margen por cada producto, sus costos directos, indirectos, y también el margen de utilidad.
¿Cómo debe ser su manejo de caja?
El manejo de caja tiene que estar por separado. Y para ello, como el emprendedor a veces tiene una unipersonal, o a veces factura como honorarios profesionales -si se trata de una empresa de servicios-, hoy tenemos una nueva figura jurídica que son las EAS (empresas por acciones simplificadas). Esta posibilidad es muy recomendable de analizar como para que la empresa tenga un RUC separado y pueda manejar de manera más transparente, incluso, lo que es el ingreso de capital o la salida, de lo que es del emprendedor versus el emprendimiento.
¿Qué ventajas adicionales ofrece una EAS?
La EAS también da la posibilidad de crecimiento mediante la captación de nuevos socios, y para un emprendimiento donde la primera fuente de ingreso es el capital propio, la segunda fuente, generalmente, está dada por préstamos, que pueden ser bancarios, financieros o de cooperativas; la tercera fuente, de proveedores, que entregan la mercadería y permiten pagar en 30, 90 días, eso es un crédito; y el cuarto ingreso debería ser el de asumir el potencial del negocio con otros socios. Las EAS dan esa posibilidad, son mucho más flexibles y te permiten tener RUC en 72 horas, entre otros beneficios.
¿Debe una persona contemplar una base de ahorro al iniciar un emprendimiento?
Es importante que el emprendedor cuente con un dinero, digamos, un soporte para sus gastos personales durante un tiempo, y para eso es importante la observación de esos primeros seis meses, justamente, para determinar esa diferencia. Se recomienda que tenga como mínimo tres meses de ahorro como para que no afecte al emprendimiento en sus propias necesidades de capital operativo.
¿Qué reflexión le genera esta semana del dinero?
Esta semana nos trae la posibilidad de plantearnos el tema de cómo estamos en inclusión, en educación, en responsabilidad del consumo porque el consumo en exceso hace daño a la salud financiera. También nos permite conversar más sobre esto, y lo ideal es ampliarla a los miembros de la familia, a aquellos que viven en pareja, que tienen hijos, que se pueda conversar sobre esto, porque el dinero es una herramienta que tiene que servir para alcanzar metas y objetivos. Tenemos que tener objetivos, saber hacia dónde nos estamos dirigiendo en la vida, en relación a nuestras finanzas, y el impacto que tiene sobre nuestra calidad de vida.