Sophia Sánchez, jefa de marketing de Feria Asunción, aseguró que el éxito de esta temporada no es casualidad. “Tenemos un plan robusto que venimos trabajando desde hace meses para que el impacto se dé justo en esta época”, comentó.
Feria Asunción se posiciona como un lugar donde los clientes pueden encontrar todo lo necesario: indumentaria, muebles, decoración y más. “A mayor tráfico, mayor venta; todos nuestros esfuerzos están enfocados en ofrecer la mejor experiencia”, explicó Sánchez.
En cuanto a los productos más demandados, la juguetería lideró las preferencias en diciembre, mientras que los artículos de decoración tuvieron su auge entre octubre y noviembre. Las cifras también respaldan el movimiento: “Tuvimos récords de ventas, con un crecimiento de dos dígitos en todas nuestras áreas”, agregó.
En Boutique Burbuja también se sintió la fiebre de las compras, Javier Núñez, su propietario, destacó el alto flujo de clientes en las últimas semanas. “Hemos visto un gran movimiento, tanto de personas solas como en familia, buscando prendas clave para las celebraciones”, compartió.
Núñez también subrayó el esfuerzo por mantener la preferencia de los consumidores, sobre todo en esta época de mayor demanda, asegurando que “el servicio y la experiencia en tienda son fundamentales”.
Sofía Uriarte, propietaria de Obsesiva Boutique, coincidió en que las fiestas son un momento clave para el comercio. “Los vestidos cortos de fiesta y las tenidas elegantes, ideales para graduaciones y eventos, fueron los productos más vendidos”, señaló.
Uriarte también destacó que los sábados por la tarde son los momentos de mayor actividad, cuando las personas tienen más tiempo para comprar. “Las expectativas están altas, no solo por las fiestas, sino también por los viajes de fin de año, que impulsan la demanda”, concluyó.
El balance deja claro que la temporada festiva sigue siendo un motor para el comercio, donde la estrategia, la innovación y la conexión con las necesidades de los clientes marcan la diferencia. La fiebre de las compras sigue siendo, para muchos, una tradición tanto como las propias celebraciones.