“Esta es una idea que surgió hace varios años, en mi casa tenía muchas bolsas acumuladas que me molestaban bastante y siempre pensaba ‘algo tengo que hacer con esto’, investigando encontré una técnica para realizar las billeteras, probé pero no salió como quería, luego pasaron los años y encontré una máquina que podía ayudar pero como no tenía el dinero para comprarla me junté con Gabriela Talavera, quien ahora es mi compañera de trabajo, empezamos con otro negocio para reunir el dinero y comprar la máquina, hasta que lo logramos y empezamos a hacer las telas plásticas, como las llamamos nosotras”, explicó Giannina Sosa, propietaria de Angiru.
Según Sosa, una billetera utiliza aproximadamente 10 bolsas de plástico, las cuales primero pasan por un proceso de limpieza, para luego cortarlas, pasarlas por la máquina que las convierte en telas y cortarlas nuevamente para después coserlas y darles la forma final. La propietaria de Angiru asegura que el producto es bastante resistente y a prueba de agua, teniendo en cuenta el material usado.
Sosa también nos comentó que producen las billeteras hace un año pero que la reciente fama se dio hace solo unos meses gracias a la colaboración de la empresa social Mboja’o, que provee las bolsas en cuestión. “En nuestro país es difícil encontrar alternativas a dicho material y lo que Mboja’o buscaba era cerrar su círculo de producción, conocieron nuestro emprendimiento y nos propusieron darnos las bolsas que utilizan para rescatar los alimentos, del mismo modo trabajamos con la Fundación San Rafael, juntamos las bolsas que sobran en sus colegios”, expresó la emprendedora.
La propietaria de Angiru mencionó que ya han realizado también agendas, cartucheras y tarjeteros, pero no en gran cantidad, sin embargo planean empezar a lanzarlas a partir del año entrante, y estudian la posibilidad de crear otro tipo de producto como carteras o bolsones. En colaboración con Mboja’o fue fijada la producción de 600 billeteras para las cuales rescataron más de 6.000 bolsas. El costo de las mismas es de G. 60.000 y G. 80.000. Parte de la recaudación por las ventas es destinada a un proyecto social de la Fundación San Rafael.
Para conocer los puntos de venta puede visitar el Instagram de Angiru @aangiru, o las redes sociales de Mboja’o, tanto Facebook como Instagram.