El proyecto fue uno de los ganadores del concurso 100+labs, organizado por Cervepar en alianza con Coca-Cola Paresa. El objetivo principal de Sostenible es la reducción de la huella de carbono en dos frentes: causado por el uso de la unidad y el otro causado por la fabricación del mismo. Otra de las motivaciones de esta acción de sustentabilidad es la reducción de la dependencia de los derivados de petróleo y la optimización de la cadena logística, según el CEO de Sostenibile, Marcos Morel.
En cuanto al aporte al medioambiente, Morel mencionó la importancia de la reducción de emisiones nocivas producto de la combustión, en el caso de los híbridos en un 40, y hasta un 100% en el caso de los completamente eléctricos. También dijo que la reutilización de la mayor parte de los componentes supone un ahorro en recursos naturales.
“La electromovilidad aún tiene grandes desafíos que enfrentar, como por ejemplo, el tiempo de recarga o el precio de las baterías. Específicamente, en Paraguay, estos mismos problemas son aún mayores, dado que la estructura país no se encuentra adaptada para la transición, lo que acrecienta la dificultad para llevar a cabo este tipo de proyectos”, afirmó el ejecutivo.
Morel describió que la transformación de vehículos de combustión a híbridos o 100% eléctricos, se realiza mediante una técnica llamada Retrofit. En el caso de los 100% eléctricos se realiza mediante la suplantación de la unidad de potencia por una eléctrica, con sus respectivas baterías y controladores.
En los híbridos se dota a la unidad un motor de ayuda, que funciona en regímenes específicos, como por ejemplo, la partida desde 0 hasta 60 km/h. Cabe resaltar que ambos procesos son mínimamente invasivos en lo que a la estructura se refiere, por lo que la seguridad de la unidad no se ve afectada, según explicó el directivo.
Por otra parte, el representante de Sostenibile indicó que el monto de inversión para realizar el proyecto es relativo, dado que el Retrofit se adapta a las necesidades del cliente. Por ejemplo, se podemos tomar una unidad de reparto que no exceda los 100 km de recorrido diario y hacerlo 100% eléctrico; esto rondaría los US$ 8.000.
Sin embargo, aclaró que si esto se realiza a gran escala los números son diferentes, puesto que se pueden conseguir ventajas con los proveedores, pero también se necesitaría de más actores sociales, como por ejemplo, las expendedoras de combustibles, que deberían evolucionar a expendedoras de energías que incluyan gas, diésel, electricidad e hidrógeno.
Otro punto importante en cuanto a la operatividad es que también los mecánicos y talleres deberían capacitarse para mantener y reparar autos eléctricos o híbridos. Destacó además que si los vehículos se convierten en híbridos, a priori se reducirían las emisiones nocivas entre 35% y 40%.
“Paraguay es un país rico energéticamente hablando; contamos con hidroeléctricas que generan energía a gran escala y no nos olvidemos que vivimos en un país donde casi todo el año tenemos sol. La energía solar es un grandísimo recurso que debemos tener en cuenta también”, ratificó el CEO.
Morel se refirió al valor de venta de un vehículo transformado y dijo que aquel es relativo. Señaló que se puede adquirir un vehículo 0 km, en sus variantes de a combustión e híbrido, y que la diferencia de precios es de alrededor de US$ 10.000 más caro en la versión híbrida. ´
Pero en el caso de los vehículos Retrofit existe el nicho de los autos clásicos electrificados, que pueden llegar a cientos de miles de dólares. Como es un mercado incipiente aún no hay muchos parámetros en cuanto a precio, resaltó.