“La flota podría tener un crecimiento exponencial en los próximos años, llegando a duplicar los volúmenes transportados por la hidrovía Paraguay-Paraná”, manifestó Raúl Valdez, presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (CAFyM).
El armador destacó que de unas 25 millones de toneladas transportadas en la actualidad, se podría llegar a 40 o 50 millones de toneladas, pero advirtió que para esto se requiere incrementar la inversión en el tamaño de flota así como en el de la mano de obra.
Hoy Paraguay posee la tercera mayor flota de barcazas del mundo, según comentó Valdez. “El país cuenta con aproximadamente 3.000 embarcaciones, de las cuales más de 2.800 están en servicio activo, transportando una variedad de cargas a través de la hidrovía Paraguay-Paraná”, afirmó.
Obstáculos
En contraposición a este panorama favorable, la situación actual se presenta más alarmante, debido a la escasez de lluvias que afecta a la región y que ha generado preocupación entre los actores de la industria, ya que se podría llegar a niveles bajos históricos del río en los próximos meses. Esta situación también exige inversiones en nuevas embarcaciones y en la capacitación de personal para hacer frente a las demandas de un mercado en constante crecimiento.
La hidrovía es una arteria vital para el comercio regional, y que beneficia en gran medida a la flota paraguaya, donde el 80% del comercio exterior del país se mueve a través de esta vía fluvial, transportando principalmente productos agrícolas como soja y sus derivados, que representan más de 11 millones de toneladas anuales.
Además, el transporte de combustibles representa el 9% de las importaciones y exportaciones alcanzando más de 2 millones de toneladas, mientras que el mineral de hierro y otras cargas para los países de la región significan más de 5 millones de toneladas anuales en mercancías que llegan a los puertos de Argentina y Uruguay, para su posterior envío por ultramar.