“Esta encuesta la hacemos instituciones financieras y organismos del Estado y está sostenida en las respuestas de 29 instituciones. Las cifras nos muestran que el porcentaje de conformidad de las entidades financieras con la coyuntura disminuyó, pero de todas maneras el nivel sigue siendo alto”, afirmó Bernardo Rojas, director del Departamento de Estadísticas Monetarias del BCP.
Según Rojas, al tomar el último trimestre de 2015, 2016 y 2017 vemos que en el cuarto disminuyó el porcentaje de aceptación –66% en 2017– pero el índice es mucho mejor de lo que se había respondido en 2015 y 2016 (24% y 31%, respectivamente).
En cuanto a la situación económica, que corresponde a los últimos tres meses y las expectativas económicas de las entidades, es decir, los próximos tres meses Bernardo se refirió: “La expectativa económica siempre se mantuvo en la zona de expansión, por encima de 50%. Los agentes financieros en general tienen muy buena expectativa de acuerdo a cómo va a evolucionar el crédito en los próximos periodos”.
El informe indicó que en el sector agrícola y ganadero las expectativas disminuyeron, aunque se mantienen en la zona de expansión, o sea, la situación sigue siendo buena. Mientras que en la industria hubo una leve reducción de las expectativas, en el comercio la situación mejoró, pero las expectativas para créditos disminuyeron y en la vivienda aumentaron las expectativas y la situación mejoró.
“El aspecto principal, que consideraron a evaluar las entidades encuestadas, es el económico, seguido por el climático, reflejado en la respuesta del sector agrícola y ganadero y luego los aspectos políticos y jurídicos”, explicó.
En cuanto a los factores que impiden la concesión de créditos, las entidades respondieron que la falta de información del cliente representa la principal dificultad, detrás se ubica el historial del cliente –que tiene relación con la falta de información–, los proyectos ineficientes y la escasa garantía de parte del prestatario.
“Los tipos de préstamos que más se llevan a cabo son los préstamos a empresas privadas, la inversión para regulación monetaria y los préstamos a entidades financieras”, acotó.