El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) informó sobre los resultados del VI Censo Agropecuario Nacional (CAN), realizado en 2022, tras la última estadística registrada en 2008.
“El Censo Agropecuario es una operación estadística de gran envergadura, encargada de recopilar información fundamental para el sector productivo”, indicó Liliana Miranda, directora de Censos y Estadísticas Agropecuarias del MAG.
El periodo de estudio fue desde el 1 de julio del 2021 hasta el 30 de junio del 2022, caracterizado por el fenómeno de La Niña con olas de calor y sequía. En total se realizaron 454.950 unidades de observación, de las cuales 336.742 son consideradas parcelas con alguna actividad agropecuaria, conformado por 291.497 fincas agropecuarias y un total de 30.401.660 ha agropecuarias.
Se entiende como finca agropecuaria a aquellas unidades que tenían al menos una de las siguientes condiciones: 1.000 m2 de cultivos; tres animales vacunos; cinco animales ya sean porcinos, caprinos u ovinos; 100 gallos, gallinas, pollos/as, pollitos; o patos; o guineas; o pavos, o gansos; 10 colmenas; 500 m2 de espejo de agua para producción de peces para fines comerciales; 2 hectáreas de plantaciones forestadas o reforestadas para fines comerciales.
En la Región Oriental se encuentran 283.052 fincas agropecuarias que representan el 97% del total y en la Región Occidental se tiene 8.445 que representa el 3%.
Según el ministro de Agricultura y Ganadería, Moisés Bertoni, aumentaron las fincas del rubro hortícola, superando las 20 hectáreas, además crecieron las fincas de 1 hectárea para consumo en comparación al 2008.
Por otro lado, Bertoni subrayó que las grandes extensiones han mantenido su superficie. “Lo que denota que eso de que el grande crece a expensas del pequeño no es cierto, sino que hubo una transformación significativa en el medio rural”, sostuvo.
La variación principal de estas fincas se dio principalmente en el departamento de San Pedro, seguido de Itapúa, Caaguazú y el Chaco.
En cuanto al uso de suelo, de las 30.401.660 ha de fincas agropecuarias, el 13,8% corresponde a cultivos temporales (principalmente soja normal, maíz zafriña y soja zafriña), el 9,6% a cultivos permanentes, el 33,1% a pastura natural, el 22,1% de pastura cultivada para corte o pastoreo, el 23,7% son montes naturales y el 0,9% a árbol forestales plantados.
Más mujeres rurales
“La variación de este censo tuvo la particularidad de que se tuvo en cuenta la participación de las mujeres. Se mantuvo la cifra de productores con una variación muy pequeña, pero sí hubo un aumento significativo de participación de las mujeres en tareas rurales, del 75%, lo que también es un indicador sumamente importante en el diseño de políticas públicas”, resaltó Bertoni.
Mientras que el registro de hombres en 2008 fue de 193.292 y 151.174 en 2022; las mujeres pasaron de 53.436 a 93.828. Por lo tanto, la actividad masculina se redujo en 22% y la femenina aumentó 75,6%.
Conservación de bosques
Con relación a la variación de superficie de finca según uso de la tierra. En cultivos temporales hubo un 26% de aumento. En tanto que en los permanentes ascendieron a 37%.
También se observa más pastura cultivada que natural, lo que revela el uso de tecnología. Asimismo, los montes naturales se han mantenido constantes en las fincas agropecuarias. Las áreas forestadas crecieron 82%.
Crecen cultivos y el arroz se dispara
En referencia a la variación de superficie sembrada, el cultivo de soja de zafra normal aumentó 36% y 112% de soja zafriña. Hubo disminución en maíz de zafra, pero aumento del 103% en maíz zafriña. Por su lado, el trigo, tuvo un aumento del 19%.
Un rubro que crece exponencialmente es el arroz, pasando de 33.000 ha a 205.000 ha, un aumento del 507% en el área de siembra.
Yerba mate con superávit
En el área de hortalizas, el tomate es un rubro que se está consolidando con un aumento de más del 30%. La frutilla aumentó casi 90%, el locote en un 80%. Y una disminución en el área de siembra de zanahoria, pero se duplicó la producción con la incorporación de tecnología.
En rubros no tradicionales, la banana creció en área de siembra con 16.000 ha. En tanto que la yerba mate duplicó su área de siembra.
“Esto nos obliga a estar más activos en la búsqueda de mercados porque la producción supera largamente nuestro consumo”, comentó Bertoni acerca de la yerba mate.
Ganadería
En el ámbito ganadero, la población bovina creció con 3 millones de cabezas, es decir 26,2%, que de 10.496.641 pasó a 13.241.944; también se dio un incremento significativo en el total de cabezas de gallos, gallinas, pollos/as, pollitos, que de 16.055.854 pasó a 31.927.426, lo que representa un crecimiento de 98,9%. Igualmente se dio en la población de ponedoras y pollos parrilleros.
En otro orden, aumentaron fincas con maquinarias, unas 22.000 fincas poseen tractores propios, un 24% superior y 7.430 fincas cuentan con cosechadoras, un 34% superior. Las sembradoras quedaron más atrás.