Las dificultades que se generaron en la industria del cemento tuvieron estrecha relación con una descarga eléctrica que sacó de servicio el transformador central de la firma Yguazú Cementos y, por ende, hubo un desabastecimiento y fluctuación en la cotización de este producto, por al menos unas tres semanas. Sin embargo, “este inconveniente fue solucionado y se está produciendo con absoluta normalidad desde inicios de setiembre”, confirmó Andrés Wardle, gerente de la firma.
"A finales de agosto solucionamos el inconveniente generado en el transformador central de la planta, que ocurrió el pasado 12 de agosto, luego de una tormenta eléctrica. A partir de ese momento recibimos asesoramiento de profesionales especializados de Argentina para solucionar el inconveniente, así como la asistencia de un grupo de expertos que trabajó directamente en planta por una semana de forma ininterrumpida", indicó.
Resuelto el problema, la planta volverá a su producción habitual este mes, generando un volumen aproximado de 57.000 toneladas de cemento, según el directivo.
“Esto significa que la firma vuelve a equilibrar el movimiento del sector de la construcción, que necesita un promedio de 110.000 toneladas por mes”, complementó.
Además, la firma concretó la importación de 15.000 toneladas de cemento, que ingresará gradualmente en camiones de 30 toneladas, “para que no haya especulación en los valores manejados”, reconoció.
"Entiendo que, a partir de la solución en nuestro generador y la vuelta a nuestra producción habitual, más la importación que concretamos, el mercado se encuentra normalizado. Aunque es un sector que varía constantemente dependiendo de factores como la demanda, la oferta y la cantidad de producción de otros fabricantes", afirmó.
Por último, Wardle comentó que en caso de presentarse otra situación similar a futuro, se podrá actuar con mayor rapidez, porque adquirieron un equipo generador con las mismas funcionalidades. En este caso, no se necesitó utilizarlo porque se logró reparar el generador anterior, destacó.