Aunque la empresa que lidera se enfoca en el desarrollo de infraestructuras tecnológicas complejas (como centros de datos, cableado estructurado y soluciones de red), desde su rol como integrador de soluciones, ha visto de cerca cómo muchas mipymes tropiezan en su intento de digitalizarse. Y no es por falta de voluntad, sino por falta de planificación y visión clara de que es lo que necesitan realmente, de acuerdo a cada momento que va atravesando la empresa.
“Una microempresa que está comenzando debe enfocarse primero en tener una base sólida. No se trata de instalar de entrada un sistema de última generación, sino de contar con un sistema básico de gestión y facturación que le permita ordenar sus procesos”, explicó en conversación con InfoNegocios.
El entusiasmo muchas veces juega en contra, porque es habitual que pequeños emprendedores, con experiencia previa en grandes empresas, quieran replicar soluciones demasiado avanzadas en negocios aún en etapa inicial. Según Bogado, eso puede ser un error costoso. “Querer hacer todo desde el inicio puede generar un abandono de tareas que después son necesarias. Lo ideal es comenzar con lo básico, e ir escalando con el tiempo”.
Además, insiste en que la digitalización no puede disociarse de la capacitación del equipo humano. Implementar tecnología sin preparar a las personas es otro de los fallos más frecuentes. “He visto muchos casos en los que se invierte en sistemas que nadie sabe usar. La capacitación es lo que garantiza la seguridad del negocio y también mejora la imagen frente al cliente”, afirma.
Para aquellas mipymes que buscan una hoja de ruta concreta, Bogado sugiere apoyarse en normas internacionales de gestión y procesos, como la ISO 9001 o las guías del Project Management Institute (PMI). No se trata de certificarse, aclara, sino de leer, entender y aplicar esos principios como guía. “Son herramientas que están disponibles en Internet, y pueden ayudarte a estructurar mejor tu negocio sin necesidad de grandes gastos”, asegura.
Y en cuanto al presupuesto, aclara que no es necesario disponer de grandes sumas para empezar: “Las inversiones van en función del tipo de servicio que se quiera ofrecer. Pero en general, se puede arrancar con recursos básicos, gestionando bien la información, los correos, los respaldos y las tareas diarias desde la nube”.
De esta manera, con más de 20 años en el rubro, Oscar Bogado resume todo en una frase que bien podría ser un lema para quienes inician su transformación digital: “El secreto está en los procesos. Si tenés procesos bien definidos, lo demás llega solo”.