“El nuevo management busca reivindicar el modelo de la gestión centrada no solamente en el resultado sino también en la persona, para que esos resultados se puedan potenciar”, afirmó Ulisses Cabral Saueia, CEO de ManpowerGroup Paraguay.
Mijael Rodríguez, coordinador de admisiones de la Universidad Comunera (UCOM), explicó que el administrador de antes se manejaba en un escenario en el que todas las empresas, las compañías y el mercado se movían muy lento, en comparación con lo que es hoy.
“En la actualidad hay elementos fundamentales que considerar en la administración de un negocio exitoso: las personas y la tecnología, con las que el administrador de antes no estaba capacitado para lidiar”, afirmó Rodríguez.
Antes el empleado de una empresa aspiraba a trabajar por 20 o 30 años en la misma firma, mientras que hoy no permanece en un lugar en el que no está contento. “Ahora el administrador debe trabajar las habilidades blandas. El líder que hace un poco de coaching con su gente es el que puede conectarlos con el propósito de la empresa y que estén motivados para obtener los mejores resultados”, acotó.
Por el lado de la tecnología también los cambios son vertiginosos, ya que antes los sistemas se renovaban cada cinco o 10 años, mientras que en la actualidad las novedades tecnológicas aparecen cada mes o semestralmente.
Ahora debe tomar decisiones cada semana, a veces cada día, y tiene que tener las aptitudes para hacerlo de manera más rápida. “Además de trabajar más el liderazgo, la capacidad de tomar decisiones debe ser más alta y también la comprensión de datos y el conocimiento del mercado”, recalcó Rodríguez.
Por su parte, Cabral manifestó que si bien es cierto que un administrador puede tener un perfil técnico marcado, “la evolución natural del management no viene por lo técnico, sino por lo estratégico y por las habilidades blandas”.
En años anteriores se consideraba muy importante que los líderes y gerentes sean profesionales recibidos, pero hoy no basta con un título universitario que los habilite, sino que además deben tener maestrías y otros estudios que les permitan manejar el negocio de una manera mucho más amplia.
“Hoy debe ser convincente, consciente del valor que se le genera a través de los resultados al cliente, tener la capacidad de identificar a sus clientes internos y sus necesidades y también estar orientado al mercado exterior. Y, sobre todo, medir algo que es muy sensible: cuál es el tiempo de respuesta del mercado y del cliente para generar resultados positivos”, expresó.
Cabral resaltó que el desafío no es solamente aprender sino desaprender los modelos actuales “para poder dar espacio a los nuevos modelos que nos permitirán mejorar el trabajo; trabajar mucho esa mente abierta, la capacidad de negociar, gestionar el equipo con autoconfianza que sea proactivo, tener iniciativa”.
El líder actual busca tener no solo una relación laboral a través de los resultados con su equipo sino que genera una interacción personal que permite al colaborador sentirse motivado, sentirse en un buen lugar para trabajar. “Se debe trabajar mucho esa flexibilidad al cambio, a la innovación y esa sensibilidad interpersonal para generar un buen ambiente laboral”, explicó Cabral.
Rodríguez remarcó que el profesional actual no solamente debe administrar sino también innovar. “Antes tenía que mantener a la empresa y tratar de no llevarla a la quiebra. Hoy te dan una empresa que no está funcionando y tenés que lograr que crezca”, destacó.