Méndez fue viceministra de Mipymes entre 2013 y 2016, y ministra de la Secretaría de Defensa del Consumidor (Sedeco) hasta el 2018. También fue vicepresidenta de asuntos gremiales de la Unión Industrial del Paraguay (UIP).
La viceministra aseguró que impulsarán iniciativas que desburocraticen los trámites con el apoyo de la tecnología, de modo a prestar una gestión más eficiente.
“Queremos enfocarnos en el desarrollo de proyectos en los cuales se dé una ocupación de la mano de obra. La industria debe ser uno de los principales motores del desarrollo económico del país y con un fuerte énfasis en aquellos sectores que generan empleos dignos”, señaló.
Asimismo, apoyarán la inversión con valor agregado y la transformación de materias primas. “También apoyar inversiones con componente tecnológico de manera a diversificar y ampliar nuestra producción de bienes industriales”, expresó.
Según Méndez, los cuatro principios definidos en la política industrial son la libertad económica, la seguridad jurídica, la coordinación público-privada, y la economía con rostro humano. Esto, establece una guía de pasos a seguir, para lograr potenciar las fortalezas y corregir debilidades.
Los principales ejes de acción de la nueva gestión son el desarrollo de clústeres industriales que componen la cadena productiva, empleo intensivo, manufactura industrial especializada con énfasis en tecnología, industria automotriz y mipymes industriales.
Objetivos a corto, mediano y largo plazo
A corto plazo, Méndez aseguró que mejorarán el acceso a las herramientas de apoyo a las industrias (incentivos y servicios) a través de la simplificación y uso de tecnología que permita una gestión más eficiente y transparente.
“A mediano y largo plazo vamos a trabajar en mejorar el ecosistema donde se desarrollan las industrias para contar con más competitividad de manera a trasladar la estabilidad macroeconómica al sector manufacturero nacional. Queremos apoyar de cerca aquellas inversiones innovadoras y tecnológicas, mirando a los mercados regionales”, apuntó.
También agregó que buscarán potenciar a aquellas industrias que transforman nuestros commodities, con el uso de la energía limpia en productos con demanda en los mercados más exigentes.
Rubros con potencial de crecimiento
La subsecretaria de Estado observa con mucho potencial el crecimiento de sectores como el de procesamiento de alimentos, y con la apertura de nuevos mercados la industria irá desarrollando productos con mayor valor agregado.
En otro orden, dijo que la industria de la salud es otro de los sectores claves que, luego del covid-19, demostró lo mucho que ha avanzado en inversión en infraestructura y laboratorios para producir medicamentos e insumos. “Sin embargo, también vimos debilidades en la alta dependencia de proveedores externos para la provisión de dispositivos médicos”, añadió.
“Con este sector trabajaremos para aumentar la oferta nacional de dispositivos médicos e insumos para el sector salud, la industria nacional tiene un enorme espacio y oportunidad para avanzar en este nuevo rubro no tradicional y con contenido tecnológico”, aseveró.
Paralelamente, sostuvo que otros proyectos como Omega Green y Paracel tienen un impacto en toda la cadena de suministros y logística, que impulsarán una mejora tanto en la infraestructura industrial como en el encadenamiento con las pymes que trabajarán en el entorno de estas empresas anclas.
Por último, Méndez expuso que no se puede desconocer la evolución del sector automotriz que ocupa a un gran número de personas, transfiere tecnología, genera exportaciones y nos vincula a las principales terminales de vehículos en la región. “Este sector seguirá creciendo en la producción de bienes, así como en el desarrollo de nuevos productos”, subrayó.
Resultado de incentivos
En cuanto a la situación actual de la industria nacional, la viceministra comentó que las políticas o herramientas de incentivos para la inversión otorgadas por el MIC (ley de maquila, ley 60/90, de Producto y Empleo, Materia Prima, Política Automotriz, entre otras) arrojaron resultados positivos en lo que va del año 2023.
Por ejemplo, en julio se aprobaron 79 nuevos proyectos bajo la ley 60/90 por un valor de US$ 289 millones, lo que significa un aumento del 49% en comparación al mismo periodo del año 2022, y supone la creación de 3.576 empleos de calidad.
Así también, bajo el régimen de maquila, la inversión extranjera ascendió a US$ 136,9 millones y la inversión nacional a US$ 152,5 millones en el último mes, lo que representa un aumento de 134% y 12%, respectivamente, en comparación al mismo periodo del año 2022.
Igualmente, las exportaciones de maquila representan el 67% del total de manufactura exportada por el país. El 71% tiene como destino a países del Mercosur.
Otro incentivo otorgado es el Certificado de Producto y Empleo Nacional, que de enero a julio del 2023 se aprobaron un total de 12.477 certificados, los cuales otorgan un margen de preferencia del 40% en las contrataciones que realice el Estado paraguayo, conforme a la Ley N°6.575/2020 y la Ley N°4.558/2011, que establecen mecanismos de apoyo a la producción y al empleo nacional, a través de los procesos de contrataciones públicas.
Por su parte el Régimen de Materia Prima ha registrado la importación de 183 millones (US$ CIF) al cierre de julio del 2023, este incentivo es otorgado con el objetivo de fomentar la inversión y mejorar las condiciones de competitividad de las industrias como fuentes generadoras de empleos y de valor agregado, y en especial para promover la creación y el crecimiento de las mipymes.