Según el especialista, un aspecto más que importante es la adaptación a nuevas tecnologías y amenazas. Cartes señaló que la adopción masiva de nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial y el Internet de las Cosas (IoT), presenta nuevos tipos de amenazas emergentes que deben ser evaluadas y mitigadas.
"Creo que el primer punto a tomar en cuenta será la evaluación y mitigación de esas amenazas emergentes. Se pueden implementar tanto medidas proactivas como reactivas para mitigarlas amenazas", comentó.
Otro aspecto crucial, según Cartes, es el fortalecimiento de la infraestructura crítica. Esto significaría desarrollar políticas y protocolos específicos para proteger servicios esenciales como la distribución eléctrica, el agua, las telecomunicaciones y el transporte.
"Ello implicaría desarrollar políticas y protocolos específicos para proteger infraestructuras críticas de servicios críticos como la distribución eléctrica, la distribución de agua y otros”, complementó.
A diferencia de lo que comúnmente se piensa en esta era digital, la colaboración público-privada es crucial para reforzar la estrategia de ciberseguridad. Esto podría canalizarse con la creación de una mesa de trabajo colaborativo. “Aunque existan muchas iniciativas, ninguna está enfocada específicamente en la ciberseguridad”, agregó.
Por otro lado, Cartes subrayó la necesidad de una educación dirigida tanto a empresas como a usuarios de tecnología. "Nos conviene a todos los ciudadanos", afirmó, subrayando que la educación en ciberseguridad debe ser accesible y dirigida a toda la población para crear un entorno digital.
Consultado sobre el beneficio que tendría el sector de las mipymes y todo el ecosistema empresarial, Cartes respondió que en realidad una estrategia ajustada es crucial para las empresas, que cada vez más migran a sistemas informatizados, y sus documentaciones y procesos ya abandonaron el papel y hoy se resguardan en nubes.
Aseveró que la actualización de la Estrategia Nacional de Ciberseguridad no es sólo necesaria, sino urgente, para enfrentar las amenazas emergentes, proteger infraestructuras críticas y fomentar una colaboración efectiva entre sectores. “La educación y concienciación de todos los ciudadanos también juegan un papel crucial en esta estrategia”, añadió.