La red de quinta generación permite aún más velocidad que la actual, al igual que descargas más rápidas y mayor cobertura, así como una conexión más estable. La importancia de esta tecnología es tal que llevó al enfrentamiento a potencias mundiales como EE.UU. y China, que buscan obtener estos beneficios, los cuales darán entrada a las transformaciones más trascendentales de la época, tales como la conducción autónoma, la impresión 3D, la telemedicina, el uso masivo del big data, la robótica avanzada y la realidad virtual.
Actualmente las redes móviles más rápidas ofrecen 45 Mbps en promedio, no obstante, la red 5G facilitará velocidades 10 veces más rápidas, una capacidad de conexión de hasta 1 millón de dispositivos por km2 y navegar a velocidades mayores a 1 Gbps. Desde abril de este año, Corea del Sur dispone de la red para todo su territorio, convirtiéndose en el primer país del mundo en hacerlo, mientras que en Estados Unidos se ofrece el servicio en las ciudades de Chicago y Minneapolis, aunque de forma limitada y solo para ciertas marcas de dispositivos móviles. Durante el año se espera la llegada a más localidades del país norteamericano.
Mientras que al otro lado del Atlántico, la misma Unión Europea se fijó como meta que en el 2020 todos los países miembros dispongan de al menos una ciudad principal con 5G disponible comercialmente y para el 2025 un despliegue total de la conexión. España se abrió paso en Europa y ya brinda el servicio a 15 ciudades, entre ellas Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga, entre otras, donde los usuarios ya estuvieron probando las capacidades de sus móviles. El lunes 17 se sumó Italia y el próximo mes se espera la incorporación de Reino Unido al grupo.
En cuanto a América Latina, Uruguay es el primer país en contar con esta tecnología, también desde abril por medio de la empresa Antel y con el soporte de Nokia, las ciudades afortunadas son Maldonado y Nueva Palmira. Otras naciones como Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile y Perú están realizando pruebas con tecnología 5G desde el 2016, en las que participan operadores de telefonía móvil locales.
Varios de estos países planean el inicio del servicio entre el 2020 y 2023 y Colombia espera abarcar el total de su territorio en menos de seis años. Sin embargo, existen varios desafíos para la ejecución de este proyecto, por ejemplo la infraestructura, los países que no quieran quedar marginados deben empezar a trabajar desde ahora en su implementación puesto que abarca recursos como el espectro radioeléctrico, el cual consiste en la autopista por donde circula la información, que a su vez se divide en bandas de frecuencia que se utilizan para diferentes propósitos.
Estas bandas son tres: por debajo de 1 GHz, para ampliar la cobertura de banda en zonas urbanas, suburbanas y rurales, así como para apoyar los servicios de internet de las cosas (IoT); entre 1 y 6 GHz para ofrecer una buena combinación de cobertura con capacidad; y por encima de 6 GHz para algunos servicios que requieren ultra velocidad. Todo esto conlleva una gran inversión por parte del Estado y las empresas que desarrollen la tecnología, además de esto, es necesario que los teléfonos móviles y demás dispositivos estén capacitados para la soportar la red 5G. Otras naciones que prometen presentar la conexión este año son Japón y China.