“Me involucré en varias dependencias de la UIP, y al cabo de cierto tiempo ellos reconocen el trabajo de sus colaboradores, no solo el mío, sino de varios”, comentó.
Acerca de lo que significa trabajar en la industria desde hace tantos años entre luces y sombras, embates y triunfos, destacó que ante todo es un trabajo, teniendo presente que la industria es un elemento básico para el desarrollo del país.
“Creemos que el Paraguay se va a desarrollar conjuntamente con su industria. Para eso trabajamos, no para juzgar si está bien o mal. El trabajo gremial es tomar el rumbo que la industria necesita recorrer y colaborar para que eso se pueda realizar”, dijo.
Con relación al posicionamiento del país en el concierto de industrias a nivel regional, de Hollanda expuso que en niveles de tamaño e inversión falta camino por recorrer, entre los factores está la geopolítica y la mediterraneidad.
“Tenemos una industria en vías de desarrollo, todavía estamos muy lejos de ser un país industrializado. En el contexto de las naciones somos un país pequeño con una industria relativamente pequeña”, afirmó. Asimismo, consideró que tenemos fortalezas en el sector agroindustrial más que en otros rubros.
No obstante, el desafío es producir más en Paraguay para dejar de depender de las importaciones. “Debemos tratar de fabricar todos los productos que importamos. Y que eventualmente pudiéramos obtener alguna ventaja comparativa, de manera a que vayamos sustituyendo las importaciones”, auguró.
A su criterio, esto inyectaría un importante número de fuentes de trabajo y repercutiría en la calidad de vida de la población que a su vez se beneficia del desarrollo industrial.
“Apostemos todos por el país. Trabajemos todos juntos. Creo que estamos yendo por el buen camino y esperemos que todos los gobernados y gobernantes entendamos que la industria es nuestro único camino para el desarrollo y bienestar de nuestra gente”, concluyó.