Históricamente, los tatuajes en Paraguay estaban vinculados a estigmas y subculturas específicas, asociadas a una imagen de rebeldía. Sin embargo, esta percepción ha cambiado drásticamente. En un poco más de 10 años, la cantidad de tatuadores ofertando sus servicios incrementó notablemente.
Ximena Pagliaro señaló que antes, el tatuaje era visto como algo marginal, asociado a “chicos malos”. “Hoy en día, el tatuaje ha pasado a formar parte de la cultura mainstream, y es común ver a personas de todos los ámbitos de la vida haciéndose tatuajes. Los estilos también han evolucionado, y aunque hay una mayor cantidad de tatuadores, esto ha enriquecido el mercado”, señaló.
La diversidad del público que elige tatuarse creció notablemente. Pagliaro destacó que “en la actualidad vemos familias que vienen a hacerse tatuajes en común, y los estilos más solicitados son los minimalistas y de líneas finas. Estos estilos son menos invasivos y más accesibles para quienes buscan algo elegante y discreto”.
Es así que a los estudios de tatuaje llegan padres e hijos, abuelas y abuelos, grupos de amigos, personas que buscan inmortalizar en piel a sus seres queridos o hasta mascotas, o simplemente impulsados por el deseo de llevar algo bonito. Y entre este público, suelen haber más mujeres que hombres, y la época de mayor demanda es entre primavera y verano.
Por su parte, el tatuador David Ditmas añadió que “en los últimos años, noté un aumento en la demanda de tatuajes de líneas finas. Este estilo ganó popularidad, especialmente entre las mujeres, que suelen preferir diseños más delicados. La tendencia actual también refleja un mayor enfoque en el arte del tatuaje como una forma de expresión personal”.
El crecimiento del mercado ha traído consigo tanto oportunidades como desafíos. Pagliaro indicó que “montar un estudio de tatuajes puede ser una excelente oportunidad, pero requiere una inversión significativa y una buena estrategia de marketing para atraer y mantener una clientela. La formación para tatuadores también ha avanzado; ahora hay más recursos y academias en Paraguay, aunque aún falta una acreditación formal”.
El crecimiento del rubro trajo consigo más profesionales y pedidos más variados. En este sentido, Ditmas afirmó que “el mercado de tatuajes es competitivo y está en constante evolución. Para ser rentable, es fundamental ofrecer un trabajo de alta calidad y conocer bien el proceso de curación del tatuaje. En ocasiones, las personas pasan por alto el proceso de curación, porque el tatuaje no es solo tinta en la piel”.
Diferenciación y tendencias futuras
En un mercado cada vez más saturado, diferenciarse es crucial. Pagliaro afirmó: “Lo que me diferencia es la conexión personal que establezco con mis clientes y la atención al detalle en mis trabajos de líneas finas. No solo se trata de hacer un tatuaje, sino de entender la historia detrás de cada diseño”.
Ditmas explicó que se especializa en líneas finas: “Trabajo con varios estilos para adaptarme a las demandas del cliente. La clave es mantenerse actualizado con las tendencias y ser flexible en el enfoque artístico”, aclaró.
El arte del tatuaje en Paraguay sigue evolucionando, con un creciente reconocimiento y aceptación en la sociedad. Sin embargo, tanto Pagliaro como Ditmas coinciden en que aún queda trabajo por hacer para consolidar la profesión y educar al público sobre la importancia de un buen cuidado del tatuaje y la formación adecuada de los artistas.
“El tatuaje es una forma de arte que está en constante evolución. A medida que la sociedad continúa cambiando, también lo hará la forma en que percibimos y apreciamos este arte. Mi consejo para los nuevos tatuadores es que se dediquen a aprender y a ofrecer un trabajo de calidad, manteniendo siempre una buena relación con sus clientes”, resaltó Pagliaro.
“El desafío es adaptarse a las tendencias y a las demandas del mercado. Es importante abarcar una variedad de estilos y siempre buscar la satisfacción del cliente. La evolución del tatuaje en Paraguay es un reflejo del crecimiento cultural y artístico del país”, concluyó Ditmas.