El vocero reconoció que el INAP transparenta y organiza todos los procesos de la industria, y, por ende, brinda seguridad jurídica a todos los interesados en invertir. “En condiciones no tan favorables, las empresas privadas se encargaban de generar un interesante volumen de ingresos –US$ 180 millones–, y con estas nuevas normativas es probable que la cifra se incremente sustancialmente”, afirmó.
“El INAP tiene como objetivo fomentar toda la cadena de valor de la industria audiovisual nacional. Además, tendrá como pilar la formación de profesionales del área, promoviendo cursos de capacitación en sus distintas áreas (maquillaje, filmación, fotografía, locación, vestuario, etc.) y a la vez, insistirá para que las universidades incluyan carreras afines en sus mallas educativas”, sostuvo Arriola, quien además añadió que se enfocarán en la captación de capital nacional o extranjero.
Para Arriola es probable que plataformas de streaming como Netflix, HBO u otras, se interesen por el mercado paraguayo. “Eso nos ayudará a sumarnos a las oportunidades que están siendo aprovechadas por la industria audiovisual argentina, brasileña, uruguaya, colombiana, chilena u otras”, aseveró.
“La producción audiovisual contempla la producción cinematográfica, documental y televisiva. La formación de talentos, atraerá a reconocidos inversores y esto tendrá finalmente un impacto positivo en la economía”, aseguró.
Otros diferenciales que saltan al momento de aprovechar las oportunidades, según Arriola, son la calidad de los contenidos generados y los costos más asequibles, en comparación a otros países.
Por último, Arriola dijo que el INAP servirá para recabar los datos precisos de la industria audiovisual, y a partir de ahí, planificar las próximas acciones del Consejo Nacional del Audiovisual.
“Este comité trabaja ad honorem, por tanto no representa un gasto para el Estado”, concluyó.