El Pampa Chaqueño, un ejemplar ampliamente extendido en el Chaco, se destaca por su adaptación al clima tropical, su precocidad, rusticidad y la excelente calidad de su carne. Estas características lo convierten en una herramienta clave para una ganadería funcional y sostenible.
La experta explicó que existen tres formas de denominar a un biotipo, está la raza, el mestizo y el criollo. Este último es el caso del Pampa Chaqueño, según Veiga, puesto que proviene de animales que llegaron a nuestro país a través de la conquista española y que sobrevivieron a nuestras condiciones climáticas, adaptándose a nuestro entorno, por tanto, el Pampa Chaqueño es una variedad de ganado criollo que solamente existe en Paraguay.
Veiga explicó que en la década de los 90, el Pampa Chaqueño entró en un programa de conservación y mejoramiento genético del cual se mantiene un registro tanto genealógico como de producción, entre otros, lo cual la convierte en la especie criolla con mayor registro a nivel nacional.
“Sí existen otros criollos en Paraguay, pero no con tantos registros como los que sí tiene el Pampa Chaqueño”, subrayó la experta.
Entre las principales virtudes de la especie se destaca la calidad de su carne, la que posee una textura tierna y con alto grado de infiltración de grasa el cual le da un sabor bastante particular y que se alcanza mediante una alimentación 100% a base de pasto natural lo que aporta a la sostenibilidad, ya que está en equilibrio con el ambiente convirtiéndolo en un producto exquisito y bastante exclusivo debido a que solamente existe en el Chaco paraguayo.
Veiga señaló que entre otras ventajas del criollo frente a otras especies locales se pueden citar su rusticidad, que es el factor que hace que los animales puedan sobrevivir a las condiciones climáticas adversas como lo son las sequías extremas, inundaciones o altas temperaturas a las cuales se ven expuestas en el Chaco. Según la experta, “otras razas estarían apenas sobreviviendo, mientras que el Pampa Chaqueño no solamente sobrevive, sino que sigue produciendo carne y terneros”.
Asimismo, la precocidad y fertilidad del Pampa Chaqueño son otros factores que resaltó Veiga, debido a que la especie alcanza su madurez reproductiva a los ocho meses y finaliza su etapa de crecimiento a los dos años de edad, periodo considerablemente menor con respecto a otros vacunos.
En cuanto al sabor de la carne, Gaspar Cabrera, propietario de Desmechado, mencionó que en su local buscan experimentar con ingredientes nacionales con sabor distintivo, pero poco conocidos y entre ellos encontraron al Pampa Chaqueño, al cual calificaron como una carne de primer nivel la cual tiene un sabor único que la diferencia gracias a la cantidad de nutrientes obtenidos mediante una crianza sustentable a base de pasto natural.