Uno de los hallazgos más significativos del informe es que la sostenibilidad escaló hasta convertirse en una de las tres preocupaciones principales para los CxOs, superando otros desafíos como la incertidumbre política, los problemas de la cadena de suministro y la competencia por el talento.
De hecho, el 85% de los ejecutivos informaron un aumento en las inversiones en sostenibilidad, un incremento considerable en comparación con el 75% del año anterior. Este dato muestra que, contrariamente a lo que sugieren algunos titulares, no hay una retirada de la acción climática por parte de las empresas.
Los ejecutivos están comenzando a ver los beneficios empresariales directos de sus acciones climáticas. En lugar de ser vistas como simples herramientas de marketing o cumplimiento, la sostenibilidad se está integrando en las estrategias centrales de negocio.
De hecho, el 70% de los CxOs anticipan que el cambio climático afectará significativamente las operaciones de sus empresas en los próximos tres años, lo que refleja un incremento en la conciencia de los riesgos y oportunidades que presenta la transición hacia una economía de bajas emisiones.
Por otro lado, el informe también revela que un 45% de las empresas están transformando activamente sus modelos de negocios para abordar el cambio climático y la sostenibilidad de manera integral. Estos líderes empresariales no sólo buscan mitigar su huella ambiental, sino que están utilizando la sostenibilidad como una herramienta para impulsar la innovación y generar nuevos productos alineados con la economía verde emergente.
Además, el 35% de las organizaciones integraron consideraciones de sostenibilidad en toda su operación, aunque estas no impactaron aún en el núcleo de su modelo de negocio. Otro tema recurrente en el informe es que la innovación está en el centro de la sostenibilidad corporativa. El uso de nuevas tecnologías, incluida la inteligencia artificial, se considera un pilar crucial para el desarrollo de productos y servicios más sostenibles.
En este sentido, el 85% de las organizaciones líderes están fomentando productos o servicios amigables con el clima, subrayando la interrelación entre innovación y sostenibilidad. Esta tendencia no sólo se limita a los productos, sino también a la mejora de la eficiencia operativa y la resiliencia de las cadenas de suministro, lo cual es vital ante un entorno de desastres relacionados con el clima, que cada vez es más frecuente.
Obstáculos y desafíos para la acción climática
A pesar del creciente optimismo, el informe también pone énfasis en aliviar varios obstáculos importantes que enfrentan las empresas en su búsqueda de la sostenibilidad. Entre los principales desafíos citados por los ejecutivos se encuentran la falta de soluciones sostenibles o la insuficiencia en el suministro de insumos más sostenibles (21%), y la falta de apoyo político y acción para el cambio necesario (21%).
Además se mencionan el temor a alienar a clientes o empleados por tomar una postura firme en sostenibilidad (19%) y el enfoque en los desafíos empresariales a corto plazo, impulsado por las demandas de inversores y accionistas (18%).
Este conjunto de desafíos destaca la complejidad de alcanzar los objetivos climáticos. Para muchas empresas, el camino hacia una sostenibilidad significativa implica superar no sólo barreras internas, sino también influencias externas, como las políticas gubernamentales y la presión de los mercados.