“Para los que nos dedicamos a eventos, noviembre y diciembre es temporada alta”, comentó Stefano Ribone Matijacevich, fundador de Stefano Catering. Durante estos meses se concentran las despedidas de empresas, reuniones de amigos y un considerable porcentaje de cumpleaños.
Para el sector de catering este período también se caracteriza por una fuerte demanda de comidas tradicionales como el vitel toné, lengua a la vinagreta y panes como el clásico chip. Además, los menús suelen adaptarse a la estacionalidad, enfocándose en platos típicos de las festividades.
Por su parte, Mikis Matthias Yaluff Von Schmeling, gerente general de La Martina Producciones, destacó que en diciembre se triplica la cantidad de pedidos en comparación con otros meses. “Es una época de unión, donde se agasaja a colaboradores y se celebran momentos con amigos y familiares. Los eventos más solicitados son colaciones de colegios y universidades, cenas, fiestas corporativas, puestas de mesas para Navidad y Año Nuevo”, explicó.
La hiperpersonalización es un punto importante, según Yalili Pukall, CEO de Epuka. “La evolución de los consumidores hacia lo digital cambió las expectativas, por eso ofrecemos experiencias que integran tecnologías como inteligencia artificial, generando contenidos en tiempo real y personalizando eventos hasta el más mínimo detalle, porque los invitados buscan algo único y memorable”, afirmó.
En cuanto a menús, Ribone resaltó que los consumidores prefieren combinaciones que permitan una experiencia variada y relajada: “Observamos más reuniones descontracturadas, con platos fuertes y varias opciones de bocaditos, Opciones como estaciones de sushi, tablas de quesos y jamones, o platos típicos adaptados en presentaciones modernas son muy solicitados”, reconoció.
No obstante, los precios también son un desafío. El aumento de los precios de los insumos y la alta demanda empujan a los emprendedores a adaptar costos sin afectar la calidad del servicio.
En el rubro de experiencias y fotografía para eventos, desde Epuka incorporaron servicios como cabinas de fotos digitales, filtros personalizados con inteligencia artificial y fotógrafos sociales que comparten imágenes en tiempo real, a través de galerías privadas. “Los invitados valoran acceder a sus fotos de inmediato y compartirlas en redes sociales”, añadió Pukall.
Entre los servicios clásicos, que no pierden vigencia, se encuentran las cabinas fotográficas tradicionales, muy solicitadas por públicos de todas las edades, y los novedosos servicios de realidad aumentada, que permiten a los asistentes interactuar de manera única en los eventos.
La decoración también sigue tendencias específicas. Para Navidad, los colores verde esmeralda y rojo predominan, mientras que en Año Nuevo los tonos plateados y efectos espejados toman protagonismo. Mikis Mattias Yaluff subrayó el uso creciente de luces LED y guirnaldas para crear ambientes cálidos y sofisticados. Además, globos esféricos de PVC —inspirados en los años 80— se volvieron un elemento popular.
Uno de los mayores retos es gestionar la alta demanda en un ambiente de alta presión. La logística, la puntualidad y la calidad del talento humano son determinantes. “Capacitar al equipo para trabajar bajo presión es esencial”, dijo Yaluff. Además, La Martina Producciones planea incorporar tecnología para optimizar la gestión de pedidos y la atención al cliente en tiempo real.
Por otro lado, la planificación temprana es una estrategia crucial. Ribone señaló que las empresas suelen reservar sus eventos con meses de anticipación, lo que permite fijar precios y organizar la logística. Sin embargo, esto no exime a los emprendedores de enfrentarse a imprevistos, como la escasez de ciertos insumos durante la temporada alta.
Asimismo, los representantes coincidieron en que el sector está en pleno crecimiento. Stefano Catering tuvo un aumento en eventos, pasando de reuniones pequeñas a grandes celebraciones de hasta 200 personas, igualmente, La Martina Producciones augura un 30% de crecimiento para el 2025. Por su parte Epuka, cierra este año con un aproximado del 30%, con una fuerte inversión en tecnología y capacitación.