“Vemos una transformación profunda en cómo se toman las decisiones de compra e inversión. El contenido es hoy una herramienta clave para construir confianza, transmitir valor y diferenciarse. No basta con mostrar solo el producto, hay que contar una historia que genere conexión y lleve al usuario a visualizar ese inmueble como parte de su estilo de vida”, explicó Germán Urteaga, fundador de SUMA Real Estate y de INSITE, la agencia especializada en marketing inmobiliario, junto con Dahiana Diarte y Chichi De Recalde.
Con una vasta trayectoria de más de una década en el sector inmobiliario, Germán ha sido testigo de cómo la digitalización y el consumo masivo de contenido en plataformas sociales y digitales han impactado la forma en que se comercializan los bienes raíces. “Hoy, si no generas contenido de valor, estás fuera del radar. La gente investiga, compara, consume contenido todo el tiempo. Ya no alcanza con mostrar renders bonitos y poner un número de WhatsApp. El consumidor busca respuestas, quiere sentirse acompañado en su proceso de decisión, y eso solo se logra cuando la marca está generando contenido que eduque, inspire y motive a tomar acción”, agregó.
Germán y su equipo proponen una nueva perspectiva sobre cómo las inmobiliarias deben posicionarse en un mercado cada vez más saturado de información. “Nosotros creemos que el marketing no debe ser solo una acción puntual dentro de la estrategia comercial, sino que debe ser pensado de manera integral desde el inicio de cada proyecto. Desde el naming, la creación del ADN de marca, el diseño visual, la planificación de medios, hasta la producción constante de contenido. Todo esto tiene que estar alineado para comunicar de forma efectiva en todas las etapas del proceso de compra”, explicó.
En la visión de INSITE, el contenido no solo busca generar leads, sino también construir una relación a largo plazo con el cliente. El marketing inmobiliario se transforma en una herramienta de fidelización, más que en un simple canal de venta. “Hoy no solo vendemos propiedades, vendemos una visión, una experiencia. Los consumidores ya no compran solo un espacio; compran la idea de un hogar, de un estilo de vida. Y eso lo transmitimos con el contenido correcto, usando imágenes que inspiran, videos que muestran la esencia del lugar, testimoniales que generan confianza, y datos de mercado que informan”, aseguró Germán.
El mercado inmobiliario paraguayo, como muchos otros en América Latina, se encuentra en un proceso de evolución constante, especialmente cuando se trata de cómo se comercializan los proyectos. “Hoy en día el consumidor tiene una gran capacidad de acceso a la información y busca transparencia. Las redes sociales, los portales de inmuebles, los sitios web y los marketplaces son solo algunas de las plataformas donde un proyecto inmobiliario debe estar presente, pero lo más importante es que el contenido esté alineado en todos esos puntos de contacto”, señaló.
Con la aparición de nuevas tecnologías, la necesidad de estar constantemente presente en varios canales se ha vuelto imprescindible. Desde INSITE se apuesta por un enfoque omnicanal que se ajuste a las necesidades y comportamientos del cliente en cada plataforma. “Un proyecto inmobiliario debe estar presente donde el consumidor está. Si bien la web sigue siendo un punto clave, hoy las redes sociales juegan un rol fundamental. La creación de contenido debe ser personalizada según el canal y, más importante aún, debe ser medible. Solo de esta manera podemos optimizar la estrategia y obtener los resultados deseados”, subrayó.
En su opinión, el mercado ha mostrado una tendencia de crecimiento sostenido en los últimos años, aunque con fluctuaciones que requieren una adaptación constante. “El mercado inmobiliario de Paraguay está pasando por un proceso de maduración. Vemos que el consumidor ha comenzado a valorar más aspectos como la sostenibilidad y la calidad de los proyectos, y no solo el precio o la ubicación. Las preferencias han cambiado, y esto también está influenciado por los cambios en la forma en que trabajamos y vivimos, lo que se ha acelerado con la pandemia”, explicó Urteaga.
Agregó que las grandes ciudades, como Asunción, continúan siendo el principal foco de desarrollo inmobiliario, pero también hay un crecimiento en áreas periféricas debido a la expansión de la clase media y la búsqueda de espacios más amplios para viviendas familiares.
Además, comentó sobre la creciente demanda de propiedades de uso mixto, como edificios que combinan oficinas, residencias y comercios. Esto responde a una tendencia global de buscar entornos urbanos más dinámicos y sostenibles. “El mercado inmobiliario no está exento de riesgos, pero las oportunidades son claras para aquellos que están dispuestos a invertir en proyectos innovadores y que respondan a las necesidades actuales de los consumidores. La clave está en adaptar la oferta a las nuevas exigencias de los clientes, que buscan propiedades más funcionales y sostenibles”, concluyó Urteaga.