Según Ojeda, la tecnología HB4 consiste en un evento transgénico que otorga a las plantas de soja tolerancia al estrés hídrico y resistencia al herbicida glufosinato de amonio. Esta tecnología no busca incrementar los rendimientos de manera directa, sino reducir las pérdidas en condiciones adversas.
“Es como un seguro para el productor. Si una planta normal, sin tecnología, pierde hasta el 70% de su rendimiento durante una sequía severa, con HB4 la pérdida podría reducirse al 30 o 50%. La planta resiste el estrés, se mantiene en pie y recupera su productividad cuando regresan las lluvias”, explicó Ojeda.
Además de la resistencia al estrés hídrico, Inbio trabaja en la incorporación de genes que otorguen resistencia a la roya, una enfermedad que afecta severamente los cultivos de soja. Este avance no solo protege las plantas, sino que también reduce la necesidad de fungicidas, beneficiando tanto al productor como al medio ambiente.
Ojeda destacó que la tecnología HB4 se encuentra en una fase avanzada de desarrollo para la soja y que Inbio planea liberarla comercialmente en Paraguay para 2027, tras completar las pruebas y procesos regulatorios necesarios. También mencionó que están desarrollando un programa piloto en maíz blanco, con el objetivo de incorporar tecnologías que optimicen su cultivo y preserven su relevancia en el mercado local.
Desarrollo con respaldo internacional
Es importante recalcar que la tecnología HB4 fue desarrollada por la firma argentina Bioceres Semillas. Desde entonces, ya se está utilizando tanto en Argentina como en Brasil, con resultados prometedores. Esto llamó la atención de Inbio, que mediante un acuerdo con la firma argentina, inició en 2018 un programa de mejoramiento para adaptar esta tecnología a las necesidades específicas del mercado paraguayo.
“Estamos mostrando avances importantes. Los ensayos preliminares y las pruebas de rendimiento en distintas localidades han sido alentadores. El objetivo es entregar a los productores variedades que maximicen su rendimiento bajo las condiciones climáticas actuales”, señaló la gerente de Inbio.
Además de implementar tecnologías avanzadas, Inbio busca fomentar prácticas agrícolas sostenibles. “La tecnología HB4 es una herramienta más para ayudar al productor, pero debe complementarse con el manejo adecuado del suelo, la rotación de cultivos y otras prácticas que garanticen la sostenibilidad a largo plazo”, subrayó Ojeda.
El compromiso de Inbio incluye también la formación de técnicos locales y la mejora de infraestructura para continuar desarrollando soluciones innovadoras que respondan a las necesidades de los agricultores paraguayos.