La Asociación de Restaurantes del Paraguay (ARPY) manifestó su conformidad con la decisión del Poder Ejecutivo de mantener el horario GMT-3. Oliver Gayet, referente del gremio, explicó que esta medida favoreció al sector gastronómico, principalmente en el aumento de la afluencia de clientes y del consumo. “Cuando se hizo el estudio para continuar con el horario de verano, nosotros fuimos consultados y como rubro apoyamos que quede permanentemente”, expresó Gayet.
El empresario también subrayó que el horario extendido mejora la seguridad para los funcionarios de restaurantes y bares, que suelen ingresar a sus trabajos en la tarde noche, cuando aún hay algo de luz. “El movimiento de nuestros funcionarios en la mañana es casi nulo, trabajamos más a la noche”, afirmó.
No obstante, a nivel más social, hay objeciones con el horario actual. En Coronel Oviedo, por dar un ejemplo, algunas organizaciones vecinales y sociales dicen que el actual horario afecta principalmente a las comunidades rurales. La principal preocupación gira en torno a los estudiantes que deben recorrer largas distancias en la oscuridad para llegar a sus escuelas, lo que genera un clima de inseguridad e incomodidad entre las familias.
En ese sentido, la senadora Blanca Ovelar anunció que impulsará un proyecto de ley para revertir la normativa vigente. En varias declaraciones, afirmó que la permanencia del horario de verano fue un error. “Ahora tenemos las consecuencias. Es un sacrificio forzar a los niños a despertarse antes de que salga la luz del alba”, cuestionó.
Asimismo, Ovelar recordó que el huso horario natural de Paraguay debería ser el de invierno (GMT-4), ya que responde a su ubicación geográfica. Sin embargo, el Poder Ejecutivo actualmente tiende a mantener el horario actual, debido a que consideran que la afectación en cuanto a traslado y seguridad por las mañanas no es tan variable.
Una alternativa intermedia es manejada por el Ministerio de Educación y Ciencias, que posiblemente brinde la posibilidad de cambiar la hora de entrada a clases en algunas instituciones. En principio, se podría trasladar la hora de entrada a las 7:30 en las escuelas en los meses de junio, julio y tal vez agosto.