Bodega Flechas de los Andes goza de un entorno inigualable y un terroir único donde se dan dos condiciones esenciales para el buen desarrollo de la uva Malbec: clima seco y una gran altitud. Es aquí donde esta variedad tradicional de uva argentina encontró el lugar ideal para desarrollar todo su potencial.
En 1999, Benjamin de Rothschild compartía proyectos con Rupert & Rothschild Vignerons en Sudáfrica, y Laurent Dassault estaba buscando un nuevo desafío. Juntos, compraron propiedades en el centro oeste de la provincia de Mendoza y se convirtieron en unos de los primeros franceses en invertir en la región de Vista Flores en el Valle de Uco.
Inspirados por su encuentro, su pasión por los grands crus, su espíritu inquisitivo y su impulso conquistador, se embarcaron en una aventura conjunta en Argentina, lejos de sus respectivos viñedos en Burdeos: Château Clarke y Château des Laurets para Baron Benjamin de Rothschild, y Château Dassault para Laurent Dassault.
Un acercamiento a los vinos
Durante un exquisito almuerzo celebrado en La Cabrera, fuimos cautivados de manera unánime por la impactante presentación del Rimapere Sauvignon Blanc, un vino que próximamente estará en Paraguay, según comentó Ricardo Fazzio de Grupo ACSA. Un experimentado conocedor lo describió como "el dulce beso de un ángel". Originario de las tierras vinícolas de Nueva Zelanda, este vino logró conquistar los paladares y corazones de todos los presentes gracias a una explosión de sabores cítricos como lima, limón maduro, pomelo, algunos toques de maracuyá y una marcada sensación final de zinc.
También degustamos el Punta de Flechas Rosé, un vino moderno y atractivo por su color y perfume. Tiene un ataque ácido, pero una vez en boca se muestra equilibrado, dulce y con cuerpo; también el Punta de Flechas Malbec, un vino joven, fresco y frutal, pensado para beberlo al corto plazo para no perder esa frescura y vivacidad. Y el Punta de Flechas Blend, compuesto por las variedades Malbec, Cabernet Sauvignon y Syrah. En nariz presenta aromas a frutos rojos y negros maduros, con notas de vainilla y especias. Un vino muy gastronómico, fácil de tomar.
Seguidamente conocimos al Flechas de los Andes Gran Cabernet Franc, un vino producido a partir de uvas 100% Cabernet Franc, con una crianza aproximada de 14 meses: 100% en foudres franceses (grandes toneles de 2.500 litros). “Cabernet Franc viene revolucionando el nuevo y el viejo mundo. Es una variedad que empieza a tomar vuelo, no es una moda, en los climas cálidos se da muy bien. Este vino sigue a una escuela más bien Toscana. Tiene un aroma más floral y una acidez punzante. Tiene características únicas, diferente al resto de los Cabernet Franc del mundo”, dijo Pablo Richardi. “Este vino próximamente estará en Paraguay”, confirmó Ricardo.
Seguimos la degustación con Flechas de los Andes Gran Malbec, un vino que en boca el impacto es redondo con taninos delicados y aterciopelados para un vino mineral, fresco y de final largo. “Tiene una excelente calidad a un precio razonable”, dijo Pablo. Es un vino añejado en barrica, tiene buena concentración, buenos taninos y buena presencia en madera. Tiene potencial, elegancia y suavidad. Es ideal para establecimientos gastronómicos especializados en carne”, especificó.
Y finalmente terminamos el almuerzo con el magnífico Flechas de los Andes Gran Corte, un blend que permite ganar elegancia al mezclar diferentes componentes y variedades. El clásico Malbec argentino marca su identidad con sus aromas a violeta y pasas de ciruelas. “Es un vino en donde la madera es protagonista. En boca, el inicio es generoso y redondo con taninos voluminosos y un final largo, con una expresión algo poderosa”, finalizó el enólogo.
La presentación de los vinos de Bodega Flechas de los Andes dejó una impresión duradera y una invitación a explorar la riqueza y diversidad que la vinicultura argentina tiene para ofrecer. Estamos ansiosos por recibir las valiosas incorporaciones vinícolas al mercado paraguayo.