La fecha inicial de arranque de vuelos con 787 a Asunción era para el 20 de mayo de 2020, pero se adelantó unos meses, ¿por qué?
La aceleración es para todas las rutas, pero hemos decidido ponerlos antes en Asunción y Córdoba por sobre Montevideo, por la coyuntura argentina, los pasajeros desde y hacia Córdoba han bajado alrededor del 20%, haciendo que Asunción sea todavía más importante de lo que ya era en el balance total de la ruta, y para mantener las seis frecuencias semanales a Asunción serán reducidos los vuelos a Córdoba a cuatro por semana y los dos restantes se triangularán con Iguazú, que comienza el 2 de agosto. Iguazú iba a ser vía Montevideo, pero ahora será vía Asunción, y la filosofía de la empresa es que todas las nuevas rutas se habiliten con 787, como el caso de Medellín y Panamá, por ejemplo. Tampoco es que se haya adelantado tanto, unos siete meses para ser exactos.
Los 27 Boeing 787 de las series -8 y -9 ordenados, pone a Air Europa a la vanguardia de la industria, ¿qué opinás al respecto?
Desde que comenzamos a volar con 787, este avión nos ha dado resultados fantásticos. Nuestros pasajeros aman los Dreamliner. Creemos que con esos aviones ya nadie podrá discutir que somos la mejor alternativa para volar desde América Latina a Europa, y en el caso de Paraguay, que somos los únicos con vuelo directo, seremos aún más fuertes de lo que ya somos. En el caso particular de Asunción-Madrid, los A330 pueden llevar dos toneladas de carga con full pasajeros, y los 787 pueden llevar casi 20, no hay punto de comparación, es un avión increíblemente eficiente. El 2018 fue el mayor año de la historia de Air Europa en cuanto a finanzas, y en gran medida, se lo debemos a los Dreamliner.
Hace tres años, después de más de dos décadas, Paraguay volvió a tener vuelos directos desde y hacia Madrid, sin escalas. ¿Cómo ves el comportamiento del mercado paraguayo?
“Asunción fue un éxito desde el comienzo. Volábamos dos veces por semana, hoy lo hacemos cinco, desde el 21 de junio serán seis y más adelante tendremos vuelos diarios. Cuando extendimos la ruta hasta Córdoba fue porque vimos un potencial de combinar ambos destinos. Argentina está ahora afectada por la devaluación de su moneda, entonces Asunción suma más que nunca, pero hay diferencias en la anticipación de compra. Normalmente el argentino compra con más tiempo, el paraguayo un poco más a última hora y es más sensible al precio, entonces, considerando el momento por el que pasa Argentina, Córdoba aporta menos y tenemos que vender los boletos más baratos para llenar los aviones. La facturación de la operación bajó, pero creo que es temporal.
Además de Madrid, ¿cuáles son otros destinos demandados por los paraguayos?
Se viaja mucho a Barcelona, Frankfurt y París, además de Madrid. Constantemente varían de acuerdo a la época del año, pero en líneas generales esos son los destinos más buscados desde esta parte del mundo.
¿Cómo ves la operación de las líneas low cost?
Creo que cada vez la brecha entre las low cost y las legacy se achica más. Las aerolíneas tradicionales nos hemos ido amoldando y bajando tarifas, y tenemos un esquema híbrido que contiene mucho de bajo costo, pero con las ventajas de una gran compañía, es decir, una red de rutas combinada y no solo para viajes de punto a punto, programas de millaje, códigos compartidos, pertenencia a alianzas internacionales, mejores aviones, y mucho más valor agregado. Inclusive, en Europa hay una percepción de que las low cost ya no lo son tanto, porque los precios son cada vez más parecidos entre las compañías. Nosotros hoy tenemos las tarifas Lite, que permiten volar al precio mínimo sin equipaje despachado, esa es una práctica de low cost, por dar un ejemplo. Hay experiencias que no han funcionado del todo bien, Norwegian y Wow, por citar dos casos, nosotros somos sólidos.
Fuente: Aeronáutica Paraguay