La institución académica funciona como internado y ofrece a los estudiantes las especialidades de bachillerato técnico agropecuario y técnico en hotelería y turismo, con la peculiaridad de que ambas son cursadas en paralelo en grupos y diferentes turnos ya que las clases son divididas en teóricas y las de campo, cuando entran a las áreas productivas, como el hotel y comedor, planta láctea, producción animal, producción vegetal y servicio general, una sección que se encarga del mantenimiento de la escuela en cuanto a electricidad, plomería, carpintería, etc.
Con la Fundación Paraguaya al frente, la escuela Cerrito funciona desde 2003 y tiene un promedio de 150 estudiantes por año. En 2018 egresaron 42 alumnos y hasta la fecha cuentan con unos 500 graduados, quienes se decantan principalmente por carreras agropecuarias como veterinaria, zootecnia, administración agropecuaria y otras como hotelería, turismo, y administración de empresas, según datos de la institución que hace un seguimiento a sus estudiantes luego de la graduación. Los estudiantes llegan de ciudades como Alberdi, Encarnación, Capitán Bado, Río Verde, Mcal. Estigarribia, Filadelfia, y del área metropolitana, San Lorenzo, Mariano Roque Alonso, Limpio y Asunción.
El establecimiento está activo durante todo el año y es mantenido con el trabajo de los alumnos quienes se dedican a la cría y cuidado de los animales, a la plantación de hortalizas, a la elaboración de productos lácteos y a la atención del hotel, siendo su principal fuente de ingresos el hospedaje y la planta láctea, único lugar donde se fabrica queso ibérico en el país. Además elaboran el tradicional queso paraguay y el burgos, así como dulce de leche, ricota y yogur sin conservantes. El financiamiento del lugar surge de la venta de estos productos, igual que los de las huertas y animales como cerdos y conejos, además de una anualidad de G. 2.500.000.
Las clases inician el 10 de febrero y finalizan el 30 de noviembre, pero los estudiantes salen de vacaciones por turno ya que deben encargarse del cuidado de la escuela y todas las áreas deben ser monitoreadas. Los interesados en formar parte de la institución deben pasar antes por un examen de ingreso que se da durante el mes de enero y consiste en internarse durante 15 días para ser evaluados en castellano, matemática y guaraní, luego pasan por el área de producción animal, vegetal y hotel para después tener una entrevista con la psicóloga. Quienes obtengan los 60 mejores puntajes logran ingresar a la escuela.
En cuanto al Hotel Cerrito, se trata de un ambiente natural donde la intención es que los huéspedes se desconecten de la ciudad. Dispone de habitaciones sencillas pero muy acogedoras, hay dobles, triples y matrimoniales con baños privados, igualmente cuentan con habitaciones compartidas en donde entran hasta 16 personas, así también poseen cinco bungalows de dos a cuatro dormitorios con living, comedor, y cocina. El hospedaje normalmente es solicitado por grupos que realizan retiros, capacitaciones, talleres, entre otras actividades, por lo que también cuentan con dos salones de gran capacidad para eventos.
En cuanto a recreación, los visitantes pueden realizar paseos por todo el establecimiento guiados por estudiantes de la escuela, también cuentan con bicicletas y caballos para montar, que son gratuitos en caso de ser parte del club de clientes de la Fundación Paraguaya, de igual manera disponen de piscina y quinchos equipados. Por último, se encuentra el comedor que es un fuerte del lugar, donde se brinda alimentos preparados por cocineros y alumnos con productos de la huerta y elaborados en la planta láctea.