1- Definir qué tipo de acciones se harán
Apenas tengamos definidos los objetivos comerciales para el próximo año, esta tarea puede ser muchísimo más fácil. ¿Necesito PR?, ¿quiero aumentar la cantidad de conversiones online o generar visual branding?, ¿me gustaría realizar activaciones de BTL?, ¿necesito una mega creatividad o una campaña 360°? Estas son las primeras preguntas que uno debe responderse para pasar al siguiente paso, ya que existen agencias especializadas en ciertos servicios.
2- Historial de cuentas y calidad de trabajo
Ya definimos qué necesitamos, ahora el siguiente paso: Nos encargamos de googlear algunos nombres, visitamos páginas webs, vemos perfiles de Instagram o Facebook, hasta incluso recurrimos al muy confiable LinkedIn. Algo muy importante al realizar esto es ver el historial de clientes que tuvo la agencia. Aquí las preguntas serían: ¿la agencia manejó clientes del mismo rubro?, ¿generaron casos de éxito?, ¿qué tipo de pautas tradicionales y digitales tuvieron? En los materiales hechos, ¿es el tipo de terminación artística o funcional que busco?
3- El team: infraestructura, experiencia y conocimiento
Con unas tres o cinco opciones, aquí ocurre algo importante: el acercamiento a cada una de estas opciones. Es necesario conocer al potencial equipo con el que trabajaremos, la experiencia de cada miembro en su labor específica nos va a permitir tener una visión acerca de lo que podemos esperar. Algunas recomendaciones:
Siempre, de ser posible, es bueno tener un breve resumen de trabajos hechos por cada persona del equipo según su cargo.
Realizar una visita a las oficinas físicas ayuda a darnos cuenta si tienen la infraestructura necesaria para poder cumplir con nuestros objetivos comerciales.
Otro factor decisivo que puede hacer fluir el trabajo o entorpecerlo, es el poder conocer la metodología de trabajo y sus procesos. Definir qué le toca a la agencia, qué nos toca a nosotros como departamento de marketing o innovaciones hará que todos lleguemos a la meta que necesitamos.
4- ¿De cuánta inversión hablamos?
Al mismo tiempo que realizamos el conocimiento del equipo y de la infraestructura de nuestras opciones no podemos dejar de hacernos esa pregunta. Esta duda se disipa al momento en el que tomamos consciencia de la infraestructura y equipo que arrastran nuestras probables agencias. Si bien es tentador aceptar ver presupuestos que nos permiten ahorrar, hay que tener en cuenta estas palabras: retorno a inversión.
Esto no es más que una versión formal de “Lo barato sale caro”. Pensemos que no estamos pagando por un flyer o un cartel de vía pública, sino que pagamos para cumplir o acercarnos a nuestros objetivos. La agencia no debe ser solo un ente mecánico que realice los materiales que solicitamos, debe haber un pienso detrás de todo, un team mate con pensamiento estratégico como el nuestro. El éxito de la agencia es nuestro éxito.
Si tenés dudas comunicate con Ojo de Pez, podés escribinos a info@ojodepez.com.py.
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