Fueron los varones los que tuvieron que soportar tal disminución, que los afectó en 11,6%, siendo los pobladores del área rural los que aguantaron mayor caída (14,8% contra 5,5% del área urbana). Por otro lado, los asalariados con ingresos menores al mínimo vigente aumentaron su índice, pasaron del 32,3% al 34,1% en la relación interanual, datos enmarcados por la variación dada en el sector rural, donde los asalariados con ingresos menores al mínimo pasaron de un 27,4% a 29,8%.
Continuando con los índices salariales, cabe resaltar que la brecha salarial de género en el área rural arrojó 3,8 puntos y en las urbes tuvo 19 puntos, seis de cada diez ocupados trabajan como asalariados (incluye empleo doméstico) y cuatro ejercen como trabajadores independientes (empleador o patrón, cuentapropistas y trabajo familiar no remunerado).
“La disminución de los ingresos y el aumento de la desocupación guardan relación con la desaceleración de la economía, pero los subempleos tiene que ver más con problemas estructurales. Que las personas estén trabajando menos horas y ganando menos del mínimo se da porque la desocupación aumenta pero igualmente las personas buscan adentrarse al mercado laboral”, expresó el economista Jorge Garicoche de Investigación para el Desarrollo.
Desocupación crece principalmente en los centros urbanos
Pasando a lo que respecta la desocupación, 264.683 no tienen trabajo y buscan activamente empleo en el mercado laboral paraguayo, representando al 7,4% de la población en edad de actividad, que reporta un crecimiento de 1,5 puntos porcentuales más que el segundo trimestre del año pasado. Asimismo, el índice más significativo de incremento de la desocupación lo tuvieron los pobladores urbanos con 8,2 puntos en la comparación interanual, mientras que en el área rural subió a 6 puntos.
Para el economista es probable que muchos de los empleos que cesaron hayan sido del ramo de los autoempleos, por lo vulnerable que son cuando existen bajas en la economía, como se está dando en el contexto actual. Al consultarle si las medidas tomadas desde la gestión pública para reactivar la economía dan señales de importancia, Garicoche respondió que las inversiones que hace el gobierno son mucho menores a las del sector privado, por lo que los esfuerzos estatales son meramente paliativas.
Ocupación en baja pero con un sector de servicios en crecimiento
En el segundo trimestre la tasa de ocupación fue de 65,9%, aproximadamente 3.291.091 personas, número que mostró una reducción de 1,1%. En el área urbana se mantuvo el mismo porcentaje de ocupación, mientras que en el área rural se observó una disminución de 2,9 puntos porcentuales, pasando de 68,0% a 65,1%, siempre en la relación interanual.
El boletín de la DGEEC indicó que de cada diez ocupados, cerca de seis trabajaron en el sector terciario, dos en el sector secundario y dos en el sector primario. El sector terciario incrementó alrededor de 2,8 puntos porcentuales (63,0% a 65,8%), gracias al aumento en el comercio, el sector gastronómico y hotelero.
Tu opinión enriquece este artículo: