El ingeniero Carlos Wenz, director de la firma, valoró este logro como una distinción clave para la trayectoria de la empresa. “Después de 34 años en el mercado, significa una satisfacción enorme porque estas certificaciones respaldan nuestro compromiso, nuestra autoexigencia y nuestro rol dentro de la sociedad y del gremio. Garantizamos seguridad y confianza absoluta a cada cliente que confía en nosotros”, señaló.
El camino para alcanzar las certificaciones no resultó sencillo. Wenz explicó que el mayor desafío consistió en comprometer al equipo humano de la constructora con los nuevos procesos y normas. “Lo más difícil fue alinear a todos bajo un mismo propósito, hacerles sentir que era un deseo del directorio y que todos debían asumir el compromiso. Son evaluaciones muy exigentes y uno debe dar la talla para superarlas”, resaltó.
En materia ambiental, el director recordó que la compañía incorporó la sostenibilidad como eje estratégico desde 2016, cuando construyó el Hotel Holiday, el primer edificio con certificación sostenible del país. “Desde entonces trabajamos como si todas nuestras obras fueran certificadas, incluso cuando el cliente no solicita una certificación formal. Lo hacemos por convicción, porque entendemos que ese es el camino de la construcción”, explicó.
Hoy, la empresa aplica criterios de sostenibilidad en cada proyecto, con políticas claras de cuidado del entorno y uso eficiente de los recursos. Wenz también ejerce la presidencia del Consejo Paraguayo de Construcción Sostenible, lo que refuerza el liderazgo de Salum & Wenz en la promoción de prácticas responsables dentro del rubro.
El ingeniero sostuvo que el futuro de la construcción en Paraguay se dirige de manera inevitable hacia la sostenibilidad. “Cada vez más, marcas internacionales exigen que las obras sean certificadas. Pero también creció la conciencia local de que debemos ser menos nocivos para el medioambiente y usar de forma racional los recursos. La construcción es una de las industrias más perjudiciales en ese aspecto, y ya se instaló una conciencia que nos obliga a cambiar”, afirmó.
En ese sentido, Wenz subrayó que el modelo de gestión sostenible ya se convierte en un estándar que muy pronto será natural en todo el sector. “Esto crece de forma exponencial. Lo que hoy parece una exigencia será la norma de trabajo dentro de pocos años”, aseguró.
De cara al futuro inmediato, la empresa se enfocará en mantener las certificaciones obtenidas, que requieren auditorías periódicas y evaluaciones constantes. “Así como las conseguimos, también podemos perderlas si no hacemos bien las cosas. Debemos trabajar duro para sostener este logro”, apuntó el director.
A mediano plazo, la Constructora Salum & Wenz se trazó un objetivo aún más ambicioso: convertirse en el principal referente nacional en construcción sostenible y responsabilidad ambiental. Con más de tres décadas de experiencia y un sistema de gestión integral avalado por normas internacionales, la constructora refuerza su liderazgo y proyecta un futuro donde la excelencia, la seguridad y la sostenibilidad guíen cada obra que emprende.
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