La acuicultura en Paraguay ha mostrado un crecimiento sostenido en los últimos años, pero aún enfrenta desafíos importantes: infraestructura limitada, falta de capacitación técnica y dificultades para integrarse a cadenas de valor competitivas. El proyecto paraguayo apunta a transformar este panorama, combinando inversión en centros de almacenamiento y procesamiento de productos acuícolas, capacitación para los productores y estrategias de mercado para fomentar el consumo interno de pescado.
“El potencial de la acuicultura va más allá de la producción: implica generar empleo, integrar pequeños productores en cadenas de valor y abrir nuevas oportunidades de exportación”, explicó un representante del Ministerio de Agricultura en comunicación con nuestro medio. Además, se proyectarán campañas para resaltar los beneficios nutricionales del pescado y estimular el desarrollo de los mercados locales, un paso clave para consolidar la industria en el país.
En paralelo, el programa Jepytaso busca ampliar el acceso a financiamiento para pequeños productores y mipymes, donde actualmente solo el 13% accede a crédito formal. La propuesta combina asistencia técnica, financiamiento y organización productiva, con el objetivo de que los emprendedores rurales puedan integrarse de manera más activa en mercados nacionales e internacionales y potenciar su competitividad.
La delegación paraguaya que acompaña al ministro Giménez incluye al viceministro de Ganadería Marcelo González, la presidenta del CAH, Amanda León, la presidenta de la AFD, Stella Guillén, y la embajadora de Paraguay en Italia, María José Argaña. Su participación en Roma no solo servirá para presentar los proyectos de inversión, sino también para establecer alianzas estratégicas con otros países, organismos internacionales y potenciales inversores, consolidando a Paraguay como un actor serio en el desarrollo rural sostenible.
El Foro de Inversiones coincide con la inauguración del Foro Mundial de la Alimentación 2025 y se realiza pocos días antes del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra el jueves 16 de octubre. Este contexto refuerza la importancia de las propuestas paraguayas, que buscan garantizar dietas nutritivas y sostenibles al mismo tiempo que generan oportunidades económicas reales en zonas rurales.
La FAO destaca que la metodología Mano a Mano utiliza herramientas geoespaciales y sistemas de información para diseñar intervenciones precisas y eficientes, asegurando que cada inversión tenga un impacto medible. Para Paraguay, esto significa poder orientar recursos hacia proyectos de alto valor, como la acuicultura, que no solo fortalece la producción, sino que mejora la calidad de vida de miles de familias rurales.
Con estas iniciativas, Paraguay apunta a consolidar un modelo de desarrollo rural moderno y rentable. La combinación de infraestructura, capacitación y financiamiento permite que el sector acuícola se convierta en un motor económico capaz de generar empleo, integrarse a cadenas de valor dinámicas y ofrecer productos de calidad tanto al mercado interno como al internacional. La intervención de la delegación paraguaya este miércoles será clave para mostrar este potencial y abrir nuevas oportunidades de inversión que beneficien a todo el país.
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