Satori Zen Club – Estanzuela, límite entre Areguá e Itauguá
Si buscás un refugio espiritual rodeado de bosque y silencio, Satori Zen Club es tu lugar. Sus bungalows tienen nombres cósmicos (Andrómeda, Orión, Lyra, Apolo, entre otros) y cada uno propone una experiencia sensorial única basada en los elementos de la naturaleza.
Piscinas climatizadas, jardines zen, terrazas suspendidas en la copa de los árboles, camas náuticas, tinas con sales, fogones y ventanales que abrazan el paisaje son solo algunos de los encantos de este complejo que invita a bajar la frecuencia y elevar la experiencia.
En Andrómeda vivís el lujo en tres niveles con jardín zen, cascada, piscina climatizada y vistas panorámicas al bosque, mientras que en Lyra, la inspiración hindú tropical con tina orientada al cerro, balcón flotante y red náutica, te transporta. Por su lado, Casiopea es ideal para familias o grupos, es el único bungalow pet-friendly y totalmente accesible.
Hacienda L&M – La Colmena
¿Y si este invierno lo pasás en una cabaña inspirada en El Señor de los Anillos o en el mundo de Harry Potter? Hacienda L&M se especializa en cabañas temáticas que combinan el encanto de la fantasía con el confort más hogareño.
Tanto la Cabaña del Hobbit como la de Harry Potter tienen chimenea, jacuzzi climatizado y hasta sauna, rodeadas de verde y con rincones que invitan a vivir tu propia historia mágica.
Según Mario Gabriel Guillén Portillo, director de la Hacienda: “El invierno es la mejor época para disfrutar de nuestras cabañas temáticas. Cada detalle está pensado para vivir una experiencia mágica, acogedora y única.” También tienen áreas de fogatas y cielos estrellados que parecen salidos de un libro.
Quinta La Paloma – Itauguá y San Bernardino
A veces, lo único que necesitamos es una buena fogata, una manta, un jacuzzi climatizado y un desayuno casero para sentir que estamos de vacaciones. Quinta La Paloma ofrece todo eso y más. Este acogedor espacio inmerso en la naturaleza está pensado para disfrutar en cualquier estación, pero en invierno cobra una magia especial.
Sus alojamientos cuentan con jacuzzi, fogón, espacios cerrados y decoración cálida, ideal para mimarse y simplemente no hacer nada.
¿Qué podés hacer?: ver pelis acurrucado en la cabaña, disfrutar del jacuzzi bajo las estrellas y despertarte con olor a pan casero.
Glamping Mbatoví – Paraguarí
Para quienes buscan contacto directo con la naturaleza sin renunciar al confort, el Glamping Mbatoví es el plan ideal. Aquí, el lujo se mezcla con lo rústico en medio de uno de los entornos naturales más emblemáticos del país.
Entre sus opciones se encuentra la Cabaña Alpina para 3 personas, con laguna privada, jacuzzi climatizado y fogón y la Cabaña Domo para hasta 6 personas, con piscina, fogón, jacuzzi y vista a las estrellas. El glamping propone un equilibrio perfecto entre aventura y descanso: desde caminatas por el cerro hasta noches de vino al calor del fuego.
Paraguay tiene espacios increíbles para que vivas el invierno como nunca antes: con calma, en conexión con la naturaleza y en entornos pensados para tu bienestar. ¿Cuál elegís?
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