El exministro de Hacienda, German Rojas, opinó que para evaluar la economía actual hay que poner en contexto los tiempos. "Tenemos que pensar en el post COVID-19. Hoy tenemos un impacto menor desde el punto de vista epidemiológico en la economía gracias a la vacunación", inició.
El economista manifestó que el desafío actual se centra en los efectos de la guerra entre Ucrania y Rusia, el desabastecimiento de alimentos que se está generando en consecuencia y la crisis del petróleo.
"Estos son factores externos sobre los que no tenemos ningún control, sin embargo, hay que encararlos", acotó Rojas. Asimismo, recordó que Paraguay tiene una velocidad diferente en el segundo semestre, al menos en lo que se refiere a los presupuestos y a la dinámica de la inversión pública.
Respecto a la disponibilidad de recursos para invertir en obras −y así seguir construyendo infraestructura−, el exministro subrayó que la dirigencia política debe ponerse de acuerdo para manejar mejor los presupuestos y que se pueda distribuir mejor el dinero.
Mientras que el economista y exdirector del Instituto de Previsión Social, Hugo Royg, apuntó que Paraguay se encuentra camino a la estanflación porque la tasa de crecimiento está disminuyendo y los precios incrementan.
Otro de los temas que abordó, que no necesariamente es un problema particular, sino transversal, es el precio del combustible. Para Royg es contraproducente tomar medidas como la fijación de precios porque se distorsiona el mercado y eso genera más daño que beneficio a la larga.
"Otro drama con el tema del combustible es que la concentración se debe regular, porque definitivamente afecta a los productores y consumidores, de todos los niveles de ingresos", precisó. En complemento, argumentó que se necesita operativizar la Comisión Nacional de la Competencia (Conacom) porque ese es el instrumento para descomprimir el oligopolio.
Por último, detalló que Petropar debe mejorar su operativa y reaccionar rápidamente, siempre de acuerdo a sus costos.
No habrá mejoras el resto del año
"Realmente no hay elementos para decir que vamos a mejorar en el segundo semestre. No se puede tener información clara para saber cómo está el clima", enmarcó el economista.
Además, precisó que hoy en día el Estado no posee las herramientas fiscales necesarias para inyectar dinero a la economía y seguir apostando a la inversión en infraestructura.
Economía incierta: déficit fiscal e incremento de precios son los principales desafíos para el segundo semestre
El segundo semestre del año, según algunos análisis económicos, lograría que nuestra economía cierre con 0,3% de crecimiento. Algo es algo, sin embargo, algunos economistas consideran que el futuro no es tan auspicioso.
Tu opinión enriquece este artículo: