Todo empezó cuando a los 12 años, Juan González Parodi, hijo de padre español y madre italiana, fue adoptado por Juan Lester Jiménez, quien le enseñó la profesión de colchonero. Cerca de 1939, el propósito era cubrir la demanda de colchones casa por casa, escardando la lana, lavando los forros y cambiándolos por nuevos, según la demanda de cada familia. Cuando falleció Juan Lester Jiménez, Juan González Parodi se independizó y fundó la empresa El Colchonero González. Desde entonces la empresa fabricó colchones y elásticos, enviándolos al interior del país.
Durante más de tres décadas fue un negocio floreciente hasta que en 1986, Clinio Juan Ramón González, hijo de González Parodi, tomó la dirección de la empresa empujándola a ser la actual industria colchonera, con instalaciones propias en la ciudad de Villa Elisa y con miras a la diversificación de sus productos.
Una industria con tradición y atenta con sus colaboradores
Juan Ernesto González, nieto de Juan González Parodi y actual director de El Colchonero González, recibió a InfoNegocios en el recorrido por la empresa, en la que colaboran 38 personas incluyendo administrativos. La producción es en gran parte artesanal, manteniendo vivo el oficio de colchonero, con una producción promedio de 24 colchones por día. “Un verdadero colchonero aprende en tres meses, pero se forma y se perfecciona en un año. Hay que renovar, y si queremos seguir tenemos que seguir formando”, expresó.
No obstante, continúan en la mira de reforzar y diversificar la producción con la adquisición de nuevas maquinarias, con una inversión aproximada de US$ 200.000 para el 2023. Además, se enfocan en ser una organización inclusiva, apostando por colaboradores con alguna discapacidad física y resaltando el talento de las mujeres en las ventas, reconociéndolas como fundamentales y considerando que toda empresa debería tener en cuenta los mismos derechos entre colaboradores hombres y mujeres. A los colaboradores de la fábrica, ofrecen un comedor con almuerzo gratuito de lunes a viernes.
Mejor descanso con colchones adecuados
Trabajar directamente con el consumidor final otorga la ventaja de ofrecer el colchón más adecuado según los requerimientos de cada persona. “Adaptar el producto a sus necesidades, porque eso es muy importante en el descanso, ya sea una persona con problemas de espalda, con sobrepeso u otro problema, tenemos que satisfacer sus necesidades. Tenemos vendedores que le pueden ayudar y guiar a un cliente a descansar, que es el objetivo final. Si nuestro cliente no descansa, no cumple su objetivo el colchón”, contó Juan Ernesto González.
El directivo explicó que la particularidad de los colchones de algodón (el tipo producido principalmente por la empresa) es que, además de que el producto sea más ecológico, logra una duración mayor, de 10 a 15 años, logrando una acomodación esparcida y uniforme a pesar del tiempo, contrariamente a los colchones de espuma.
El mercado del descanso
En la industria, los golpes de la pandemia están sintiéndose más este año que el anterior, según González, siendo truncado el relacionamiento tradicional cara a cara con el cliente de colchones. “Tenemos un porcentaje de 30% que estamos sintiendo en las ventas”, reconoció, no obstante destacó la ardua labor de los televendedores.
El algodón se destaca como materia prima principal, junto con los alambres que conforman las estructuras de resortes fabricadas en el propio taller. La vuelta a la estabilidad del algodón otorgó una pequeña sumatoria hacia la seguridad del negocio, junto con los proveedores de telas que no bajaron la guardia. Sin embargo, como para otras industrias, el alambre escasea y aunque El Colchonero González aseguró un stock suficiente para seis a siete meses, urgen facilidades para la importación de materiales, tanto para esta como para otras industrias que necesitan elaborar sus productos y dinamizar la economía, evitando incrementos en el precio final.
Pero, ante todo, el directivo manifestó que la situación para el país puede mejorar en dos o tres meses. “Hay buenas perspectivas, van a ser meses mejores. Creemos que no vamos a terminar un mal año este 2021, que se va a reponer la economía”, agregó.
Por último, señaló que las principales motivaciones de El Colchonero González son la generación de mano de obra para la comunidad y el deseo de que la industria avance. “Ya que el que no se innova, perece”, expuso. Para González, el trabajo de la tercera generación de El Colchonero González es sostener la tradición en el tiempo, pero con innovación.
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