Se aplica cada vez más en consultorios médico nutricionales; tiene base científica y no es tan difícil de implementar. Los nutrientes que cumplen funciones anti edad actúan a nivel celular incidiendo de forma directa o indirecta en el proceso de envejecimiento.
Las vitaminas A, C y E, intervienen en la formación y mantenimiento celular, antioxidantes por excelencia compensan el proceso de envejecimiento natural generalmente acelerado por la edad, estrés, medicamentos, cambios hormonales, mala alimentación solo por nombrar algunos factores.
Los fitonutrientes como Luteína y Licopeno, son pigmentos naturales de los alimentos que cumplen similares funciones. La Coenzima Q10, Amino ácidos esenciales como Lisina, Carnitina y Triptófano se involucran en la producción de energía de cada célula y plantas como Ginseng y Gingko se destacan como protagonistas de la historia potenciando la energía, memoria y rendimiento. Claramente están integrados al mundo de la cosmética hace mucho más tiempo que a la dieta y han demostrado y corroborado su eficacia.
EN LA VIDA REAL
Para encontrarlos en cantidades suficientes habría que agregar a un estilo de vida, en línea, o sea, equilibrado y armónico: frutos rojos, frescos, el más fácil de conseguir es el arándano e incorporarlo a la rutina. Bayas, de Gogi o Acai, se consiguen en tiendas especializadas o en alimentos funcionales diseñados especialmente con esos propósitos. Nueces, vegetales de hojas verde oscuro, tomates, vegetales amarillos y naranjas, té verde, granos enteros, porotos de soja, pescado en especial salmón, yogur y cacao serían los básicos a incluir en la dieta en forma sostenida y en cantidades adecuadas al resto de la alimentación.
Dichos alimentos suman para optimizar los procesos naturales de mantenimiento de las células. Como todo proceso, no es cuestión de usarlas una vez y ver si funcionan, sino de agregarlas como elementos permanentes a la rutina diaria. No frenan el tiempo, pero ayudan a contrarrestar las consecuencias cada vez más tempranas del ritmo vertiginoso en el que vivimos. Compensan la falta de sueño, excesos y déficits de nutrientes.
Y lo más importante de todo: no es necesario esperar a tener 40 para empezar…
Más información en www.comermejor.com.uy
@lucianalasus en Instagram y Twitter.
Tu opinión enriquece este artículo: