“El mercado nacional está viviendo un momento interesante, especialmente en Latinoamérica, donde se pone en valor la herencia cultural, la autenticidad y las raíces locales”, señaló Cabarcos. Esta tendencia, ganó fuerza en países como Perú y Brasil, y comienza a instalarse en el mercado paraguayo, generando un auge en la autoestima de la identidad patria, visible en el diseño de marcas que ahora celebran su historia y tradición.
Uno de los elementos más valorados por las marcas actualmente es el heritage, es decir, la historia de la marca. Cabarcos enfatizó que este aspecto es invaluable y no se puede comprar. “Paraguay cuenta con marcas que llegan a los 40, 60 o incluso 100 años. Esa historia es un activo estratégico para la industria y genera una ventaja competitiva frente a marcas internacionales recién creadas. Ejemplos recientes de empresas locales que desatacaron por reconocer y comunicar su historia incluyen nombres como Scavone y Modiga, que aprovecharon sus aniversarios para reforzar su identidad”, mencionó Juanma.
Pero no se trata solo de mirar al pasado, el desafío está en equilibrar la esencia de la marca con las tendencias contemporáneas. Cabarcos explicó que, en los últimos cinco años, muchas marcas actualizaron su identidad visual para adaptarse a los cambios del mercado y la comunicación moderna. Esto implica integrar herramientas digitales, redes sociales como TikTok o Instagram y un diseño más flexible, sin perder la autenticidad que define a cada marca.
“El camino más potente para las marcas nacionales está en dejar de mirar tanto hacia afuera y empezar a explorar lo que tienen adentro, su propósito, raíces y esencia. Después, se trata de dialogar con las tendencias, las plataformas y los recursos disponibles sin perder autenticidad”, afirmó Cabarcos. Un ejemplo claro de esto es Pilsen, que logra mantener su frescura y relevancia apelando a la tradición, al deporte y a elementos culturales locales, mientras se comunica de forma moderna y cercana a su público.
“Hoy la calidad es un commodity. Todas las marcas ofrecen productos de alta calidad; el diferencial ya no está solo ahí, está en cómo se conecta y fideliza a la audiencia”, dijo Cabarcos. Según él, las marcas que logran diferenciarse son aquellas que desarrollan habilidades blandas, comunicación efectiva, fidelización, impacto social y sustentabilidad. La capacidad de abordar temas sensibles de manera inteligente y genuina también es clave para fortalecer la relación con los clientes y construir fans de la marca.
Sin embargo, muchas empresas aún se mantienen al margen de estas tendencias por miedo, falta de tiempo o recursos, limitando su capacidad de innovar. Cabarcos advierte que el mercado actual exige rapidez y audacia: los cambios son cada vez más radicales y los consumidores, especialmente los jóvenes, marcan el ritmo de las tendencias. Ignorar esta dinámica puede costar visibilidad y relevancia frente a marcas locales emergentes o competidores internacionales.
Mirando hacia el futuro, el especialista anticipa que la diferenciación de las marcas no se dará únicamente por el producto o servicio, sino por la forma en que las empresas interactúan con sus clientes, integran la sustentabilidad y generan impacto social.

Tu opinión enriquece este artículo: