Más allá del aspecto cultural, esta festividad representa una oportunidad de negocio significativa para los establecimientos dedicados a la venta de empanadas, que aprovechan para incrementar sus ventas y fortalecer el vínculo con sus clientes. En esta ocasión, conversamos con representantes de algunos de los locales más emblemáticos que mantienen viva esta deliciosa tradición y que, a su vez, encuentran en ella una forma de potenciar su crecimiento empresarial.
Marcela Conocchiari, gerente de la sucursal de Villa Morra de Bar Leo, destacó el espíritu familiar que caracteriza al restaurante. "El Bar Leo siempre ha sido una familia, y sigue siéndolo con su personal. Eso le da un sabor único, el sabor de hogar, el sabor casero. Llevamos 59 años en el mercado, y esto nos ha permitido formar parte de la vida de muchas generaciones", comentó Marcela.
Este sentido de pertenencia no solo se refleja en el ambiente del local, sino también en su estrategia comercial, que incluye eventos en su patio, como música en vivo los domingos, para atraer a más clientes y brindarles una experiencia completa.
Este año, las ventas aumentaron un 20% en comparación con el 2023, alcanzando la producción de unas 300 empanadas diarias entre sus dos locales, y las empanadas fritas siguen siendo las preferidas por el público. "Queremos ofrecer un lugar donde la gente pueda disfrutar no solo de nuestras empanadas, sino también de un ambiente único", añadió Marcela, subrayando la importancia de ofrecer un valor agregado para fidelizar a los clientes.
Por su parte, Eric Monin, director de Don Ramón, ha apostado por el marketing experiencial como una herramienta clave para fortalecer la relación con sus clientes. "Ya hace cuatro años que celebramos el Día de la Empanada regalando empanadas en todos nuestros locales. La gente ya sabe que cada 4 de octubre se arma una fiesta: hay juegos, actividades y, por supuesto, empanadas gratis", relató Monin. En el primer año regalaron unas cuatro mil empanadas, y este año esperan llegar a las treinta mil, lo cual no solo sirve como promoción, sino que contribuye a la construcción de una experiencia memorable para el cliente.
Monin también mencionó la evolución del consumidor paraguayo, que se ha vuelto más exigente y busca calidad y sabor en cada bocado. "El consumidor ya no compra empanadas de cualquier puestito. Hoy en día, la gente busca calidad y nosotros nos esforzamos por ofrecer eso", aseguró. Este enfoque ha llevado a un incremento del 30% en la producción respecto al año anterior, un reflejo del crecimiento de la marca y de la demanda sostenida en el mercado local.
Mientras que Liz Cabral, propietaria de Jumbo Empanadas, enfatizó la importancia de la variedad para captar y retener clientes. "Tenemos más de 25 sabores disponibles y siempre estamos adaptándonos a las preferencias de los consumidores paraguayos. Hacemos promos especiales para el Día de la Empanada y queremos que todos los que aún no han probado nuestras empanadas se animen a hacerlo", comentó. Entre los sabores más populares se encuentran carne, jamón, pollo con salsa catupiry y la versión chilena, destacando que las empanadas fritas son las más solicitadas.
Según Cabral, la calidad del producto ha sido clave para mantener y aumentar las ventas este año, superando los números del año anterior. "Los gustos de los consumidores han cambiado y nosotros hemos sabido diferenciarnos ofreciendo opciones para todos", afirmó. La capacidad de adaptación ha sido fundamental para el éxito de Jumbo Empanadas, una lección importante para cualquier negocio que busque crecer en un mercado competitivo.
Desde Don Vito, Camila Domínguez, encargada de marketing, contó cómo celebran este Día de la Empanada con una acción especial que se ha vuelto una tradición entre los paraguayos: ¡la lluvia de empanadas! Esta es la cuarta edición consecutiva y sigue siendo una de las favoritas de los consumidores.
En cuanto a los sabores más populares, la tradicional empanada redonda de jamón y queso sigue liderando las preferencias. "La marca ha evolucionado a lo largo de estos años, ofreciendo nuevos sabores de empanadas, productos adicionales y nuevos puntos de venta para estar cada vez más cerca de nuestros consumidores", agregó Domínguez. Además, como novedad de este año, quienes lleguen con su pilotín recibirán un regalo extra para acompañar sus empanadas y disfrutar con estilo.
En cuanto a las expectativas para 2025, Domínguez mencionó que el negocio de empanadas tiene una serie de oportunidades y desafíos: "Queremos orientarnos hacia las tendencias del consumidor, ofreciendo sabores únicos que nos destaquen dentro del mercado y generando experiencias con el cliente más allá del producto, creando historias alrededor de las empanadas".
Respecto a los planes de expansión, Domínguez destacó el enfoque en abrir más locales en formato de Store in Store, llevando la marca a ciudades aledañas a Asunción para que más consumidores puedan disfrutar de las empanadas de Don Vito.
Más allá del sabor, el Día de la Empanada es una muestra de cómo la gastronomía puede convertirse en una herramienta estratégica para los negocios. Los diferentes enfoques adoptados por Bar Leo, Don Ramón, Don Vito y Jumbo Empanadas reflejan cómo la tradición puede combinarse con innovación empresarial para no solo satisfacer la demanda del cliente, sino también para fortalecer la identidad de la marca y fomentar la lealtad de los consumidores.
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