“Para tener casas más frescas, los materiales deben ser menos conductivos de calor. Por ejemplo, si tenés una loza de hormigón como techo, tenés que saber que esta loza absorbe calor durante el día y a la noche expide aire cálido. El techo convencional con teja española, que es bastante utilizado en las construcciones, también absorbe el calor y pierde el mismo lentamente por la noche”, explicó.
Una alternativa para bloquear la entrada de calor, según Baranda, puede ser colocar un material inhibidor de transmisión de calor entre la teja y el tejuelón (en el techo). Estos materiales pueden ser poliuretano proyectado, que sirve también de aislante acústico o isopor.
“Nosotros utilizamos las chapas termoacústicas en las construcciones, que sirven para aislar el calor y la acústica. En cuanto al precio, es bastante competitivo, porque debemos acordarnos que el techo de hormigón es relativamente costoso”, subrayó.
Baranda agregó que otros problemas pueden ser las paredes, que tienen un contacto directo con el sol durante la jornada y usualmente transmiten calor, de la misma manera que el techo de hormigón o un techo de teja española.
“Antes las estructuras tenían el corredor jeré que impedía que el sol tenga contacto con las paredes, y permitía la circulación de viento. Pero como es costoso hacer un corredor así, una alternativa es hacer una doble pared. Es decir, una pared convencional y el espacio del medio revestirlo con poliuretano proyectado o una cámara de aire, y cerrar de nuevo con ladrillos”, recomendó.
Sobre la inversión, el ingeniero aclaró que la aplicación de estos materiales o sistemas en la construcción puede generar un costo adicional, pero se compensa con el ahorro en acondicionadores de aire durante toda la vida.
Por ejemplo, con un techo con sistema aislante, una casa evita el ingreso de calor y se mantiene cerca de la temperatura ambiente. Entonces, si marca 40 grados, el espacio tendrá exactamente la misma temperatura, pero en un techo con sistema tradicional, el calor se potencia y se mantiene hasta altas horas de la noche.
“Esto hace que el aire acondicionado también deba trabajar más y por más tiempo, porque en vez de enfriar un ambiente en 2 o 3 horas, el calor intenso no lo permite. Este tiempo se podría reducir considerablemente, al igual que los gastos, si se aplican estas sugerencias”, aseguró.
En algunos domicilios realizados por Obrasur aplicaron el sistema de doble pared, con un costo adicional de G. 7 millones por habitación, señaló el directivo. “Estas paredes estaban expuestas todo el día al calor, pero definitivamente no transmitían ese aire caliente”, enfatizó.
En el caso de tener ventanas o puertas de vidrio, Baranda puntualizó que es interesante aplicar un doble vidriado hermético (DVH), que es un excelente aislante. Para más información, los interesados pueden escribir al correo contactos@obrasur.com.py o llamar al (0994) 203-642.
Tu opinión enriquece este artículo: