Hace algunos años era común escuchar que Paraguay no podía desarrollar industrias puesto que el mercado era tan reducido que la escasa demanda no justificaba hacer grandes inversiones, debido a que cualquier proyecto manufacturero de gran envergadura no tendría la rentabilidad necesaria para que un emprendedor decida arriesgar su capital en él.
Sin embargo, hoy Paraguay resulta atractivo para la radicación de inversiones, aun con un mercado que sigue siendo relativamente pequeño. ¿Dejó de ser relevante la cantidad de habitantes?
“No pasa por el tema de habitantes, porque generalmente las inversiones no vienen para cubrir el mercado local. Los grandes capitales vienen para llegar a otros mercados y la cantidad de nuestra población no es un tema central en la atracción de inversores; vienen por la seguridad jurídica, la claridad del sistema tributario, por las oportunidades”, respondió el economista Jorge Vergara.
Mientras que la economista Martha Coronel sostuvo que la población de un país aún tiene alguna influencia en la decisión de los inversores. “Es verdad, somos pocos habitantes y con bajos ingresos, que hacen que la demanda interna no tenga suficiente fuerza para hacer atractivo al país por sí solo”, recalcó.
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Pero hoy Paraguay no es visto como un mercado aislado sino como uno ampliado, aunque deberían generarse las condiciones para que los inversionistas consideren al país como un destino para elaborar productos que luego se venderán en el mundo. “Pero eso requiere una adecuada estrategia de posicionamiento en el exterior”, aclaró la profesional.
Coronel agregó que con una política comercial efectiva se puede atraer rubros o industrias que, por ejemplo, formen parte de la cadena de producción de Brasil, que constituye de por sí un gran mercado ampliado.
La ubicación del país en el centro de América del Sur también es una ventaja comparativa, siempre y cuando se generen condiciones para aprovechar esa posición geográfica ventajosa. Una aspiración colectiva es que Paraguay sea el hub del subcontinente.
La pretensión está justificada, considerando que Asunción se encuentra en una posición equidistante de las ciudades más importantes de la región. “Pero todavía nos cuesta posicionarnos como hub porque para eso debemos tener la infraestructura adecuada”, indicó la experta.
Lo que podemos dar
El bono demográfico que tiene Paraguay es una ventaja para las inversiones, con una población joven dispuesta a trabajar y a aprender. Y hay más: “Todos crecimos creyendo que nuestro desarrollo industrial sería para satisfacer las necesidades locales pero esa era una mirada muy estrecha. Hoy el mercado es el mundo, y es la logística la que hace la diferencia, la localización, los incentivos. Eso es lo que se busca a partir de ahora”, resaltó Vergara.
Coronel insistió en que se necesita crear condiciones para atraer inversiones “y decirles, sí, efectivamente, si venís vas a tener estas ventajas, vas a producir a menor costo y vas poder venderle al vecino, a tu país o a otro; pero hay que abrir mercados y tener infraestructura para aprovechar la posición estratégica, que soporte el paso de camiones, un aeropuerto que sea moderno y despache aviones rápidamente, sin mucha burocracia”.
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EL PEKKO EL :
Entiendo que la densidad poblacional es una cuestion que una y otra vez desde hace decadas es foco de ciertos analisis economicos.......y la verdad es una custion tan llena de contradicciones. Somos muy pocos para muchas cosas importantes, pero demasiados para otras que son fundamentales para lograr el verdadero desarrollo. La cuestion salud que es importante para todo pero mas aun para ser productivos, asi como la educacion...estan inmesamente atrasados. Las cuestiones de infraestructura ni que decir...........y todo lo que se hace ese aspecto pareciera ser de papel de arroz. Nuestro problema ya casi es ancestral en lo referente a calidad y productividad. Pero entiendo que para mantener la esperanza es importante opinar segun los modelos economicos perfectos, que tambien es un mal de nunca acabar.