Según Gómez, las estrategias de comunicación se diseñarán cada vez más a medida, adaptadas a las necesidades de los consumidores y respaldadas por datos reales. Además, las experiencias inmersivas, como las ofrecidas por la realidad aumentada (AR) y la realidad virtual (VR), redefinirán la interacción entre marcas y audiencias.
“El contenido generado por usuarios (UGC) será una herramienta clave para transmitir confianza y autenticidad”, afirmó. Al mismo tiempo, las marcas tendrán que priorizar valores sostenibles y operar con ética digital para mantenerse relevantes en un mercado donde los consumidores son cada vez más exigentes.
La inteligencia artificial está transformando el marketing al automatizar procesos, realizar análisis predictivos y personalizar contenido en tiempo real. Sin embargo, Gómez subrayó que, aunque la IA simplifica muchas funciones analíticas y operativas, “nunca reemplazará la creatividad, humanidad y el sentimiento que los humanos pueden aportar a las ideas”. La combinación entre tecnología e ingenio humano será la clave del éxito.
En este panorama, los consumidores buscan marcas auténticas y responsables. “Las empresas que no sean ágiles y transparentes perderán relevancia”, advirtió Gómez. En 2025, la personalización no será solo una ventaja competitiva, sino una expectativa básica, los consumidores demandarán experiencias únicas adaptadas a sus gustos e intereses.
TikTok e Instagram seguirán liderando el mercado, según la experta, junto con nuevas plataformas de video corto y canales de streaming. Estas herramientas permitirán a las marcas conectar de manera más directa y creativa con audiencias diversas, consolidando el papel del video como formato principal.
A pesar de los cambios, el marketing de influencers seguirá siendo relevante, aunque con un enfoque más selectivo y auténtico. “Se apostará por los microinfluencers y los nichos, porque los consumidores valoran opiniones genuinas de personas reales", destacó Gómez. Además, el contenido generado por los usuarios continuará siendo fundamental para construir confianza y conexiones emocionales.
Uno de los principales retos será mantener la autenticidad en un contexto altamente automatizado. “La creatividad, la capacidad de innovar constantemente y el carácter orgánico de las ideas serán esenciales para destacar,” señaló Gómez. Además, los comunicadores deberán mantenerse actualizados y preparados para adaptarse a tendencias en constante evolución.
El entorno digital también abre oportunidades para las pequeñas empresas. Con herramientas digitales accesibles y estrategias ágiles, estas empresas podrán competir con marcas más grandes. “La creatividad y la especialización en nichos permitirán que las pequeñas empresas se destaquen en el mercado”, afirmó.
El año pasado, el sector de relaciones públicas vivió una reactivación marcada por el regreso de eventos, activaciones, talleres y brunches. “Las marcas volvieron a acercarse a sus clientes mediante experiencias presenciales”, recordó Gómez.
Entre las acciones más demandadas destacó el manejo de influencers, donde se transformaron en verdaderos embajadores de las marcas al conocer cada detalle y transmitir su esencia a los seguidores. Por ello, para 2025, la creatividad basada en datos, la adaptabilidad a nuevas tecnologías y la capacidad de gestionar la ética digital y la sostenibilidad serán las habilidades más valoradas.
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