El presidente saliente, Guillermo Mas Duarte, destacó la unidad gremial como pilar del progreso alcanzado. En su discurso de asunción, Heisecke delineó los principales objetivos de su gestión: consolidar el rol del gremio en la elaboración de políticas públicas, fomentar la participación de más empresas dentro del sector y potenciar el Centro de Estudios Económicos de la Capaco como una herramienta fundamental para la toma de decisiones basadas en evidencia. “Vamos a fortalecer nuestro gremio a partir de una plataforma estratégica”, enfatizó.
Este nuevo período de liderazgo llega en un momento clave para la construcción en Paraguay. Tras varios años marcados por una baja ejecución presupuestaria y un nivel de inversión pública limitado, el sector está experimentando una reactivación sostenida desde el segundo semestre de 2024. Indicadores del Banco Central y del Ministerio de Economía y Finanzas muestran un crecimiento que supera al promedio de la economía nacional, acompañado por una recuperación del empleo y una mayor demanda de materiales de construcción como cemento, hierro y caliza.
La dinámica actual también está vinculada a un repunte de la inversión pública, especialmente en proyectos viales e infraestructura sanitaria, aunque aún se espera una mayor ejecución efectiva en 2025.
Sin embargo, el buen momento también expone desafíos. Uno de los principales es la necesidad de mejorar la oferta de insumos y servicios ante una demanda creciente, que ha presionado los precios y generado cuellos de botella en la producción local. Aunque la industria nacional está respondiendo con aumentos en el despacho de cemento —16 % en marzo con relación al mismo mes del año anterior—, el crecimiento del sector exige ajustes para evitar recurrencias en las importaciones.
Otro aspecto clave es la implementación eficiente de programas de vivienda social como Che Róga Porã, que podría generar un fuerte impacto tanto en la calidad de vida de las familias como en la dinamización del mercado interno. La falta de desarrolladores adaptados a los requisitos de este tipo de proyectos y la limitada capacidad de pago de los beneficiarios han sido, hasta ahora, obstáculos que requieren políticas públicas más afinadas.
Desde la Capaco se trabaja también en fomentar políticas de Estado que trasciendan los gobiernos y aseguren la continuidad de las grandes obras de infraestructura. El gremio impulsa la creación de un Consejo de Política de Infraestructura, una mesa multisectorial que integre a actores públicos y privados para definir una hoja de ruta a largo plazo en materia de inversión, planificación urbana y movilidad sostenible.
En ese sentido, el presidente Heisecke y su equipo reafirman su compromiso con el desarrollo equilibrado del país, buscando un entorno de negocios más previsible, transparente y con oportunidades para empresas de todos los tamaños. La meta es clara: posicionar al sector construcción no solo como un dinamizador coyuntural, sino como un pilar estructural de la economía paraguaya.
“Mi meta fundamental y compromiso está con las empresas pequeñas y medianas de Capaco. Aglomeramos a más de 200 empresas, de las cuales el 80%, si no es más, son las empresas pequeñas y medianas. Entonces, a ellas les debo, no hay favores, pero sí compromiso, en el cual voy a trabajar para ese sector del gremio”, concluyó.
Tu opinión enriquece este artículo: