Por ejemplo, el reconocido supermercado gourmet, Casa Rica, viene trabajando desde hace 4 años en este programa, y han acogido a más del 30% de los participantes, brindándoles oportunidades en sus distintas áreas, de acuerdo a los perfiles de cada uno.
Rodrigo Jara, encargado del departamento de Recursos Humanos del supermercado, explicó que en conversaciones con autoridades nacionales y referentes del sector privado, vieron que existían muchos jóvenes en este estado de vulnerabilidad, por ende, decidieron acoplarse rápidamente al programa, para cambiar esta situación social.
“Casa Rica funciona como un coordinador flexible de los horarios de los chicos CIRD para que todos los que están en proceso de culminación de estudios, puedan acudir a clases y así cumplan con su deseo de culminación de estudios académicos y/o profesionales”, añadió.
La Fundación CIRD tiene un esquema de trabajo nutrido para lograr los cambios deseados en la población juvenil. Inician las acciones con entrenamientos en la arista actitudinal, como la orientación vocacional, desarrollo de habilidades blandas que lo denominan “habilidades para la vida” y, por último, desarrollan talleres de búsqueda efectiva de empleo.
Además, realizan capacitaciones específicas en el SNPP para adquirir más conocimientos específicos en panadería, cocina, confitería, atención al cliente o idiomas.
“Primeramente, formalizamos la contratación, luego inician sus labores dentro de la empresa, y desde ahí tienen toda la posibilidad de crecer dentro de la empresa, pueden ascender de cargo o pueden aprender y expandir sus conocimientos de las demás secciones, es decir, pueden ir aprendiendo de panadería, luego confitería, cocina, restaurante, logística, administración”, argumentó.
“Tenemos testimonios positivos de este proceso, hoy día ocupan cargos dentro de la empresa y con un desempeño muy bueno en marketing, jefaturas de sala, encargados en línea de producción de alimentos, asistentes administrativos, entre otros sitios”, detalló.
Sumarse
Jara señaló que le gustaría que empresas de diferentes rubros puedan sumarse a este tipo de trabajo en conjunto de ganar-ganar para brindar condiciones de aprendizaje, profesionalización y desarrollo humano a jóvenes en situación de vulnerabilidad.
“Detrás de cada chico o chica, hay una familia, hay una necesidad y por sobre todo hay esperanza de un pasar mejor. Como organización hemos sabido empalmar nuestras fortalezas con las necesidades de determinada población juvenil, así damos al cliente una mayor satisfacción en Casa Rica y a los chicos, la oportunidad de crecer como personas y profesionales”, aseveró.
Contacto
Para mayor información referente a este programa u otras relacionadas al CIRD, puede ingresar a la página web www.cird.org.py.
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