¿Qué potencial económico encontrás en el país?
Trabajé en varios países, y en Paraguay encontré una mezcla de muchas oportunidades. Primero, parece un país chico porque está rodeado de gigantes, pero tiene casi el tamaño de Francia, es más grande que Alemania, pero tiene un 12% de la población. Entonces tenés un territorio extenso, con gran capacidad productiva. Sin embargo, lo que no se ve bien es su capacidad de ser un hub, tanto para la producción agrícola como la industrial. Su posicionamiento geográfico es un lujo y tendría que ser un lugar de producción para toda la región. Desde el punto de vista de potencial, veo a Paraguay como un país que tiene 30 años de crecimiento a 4 o 5% sin problemas, porque todavía tiene mucho potencial no aprovechado.
Recientemente se habló de una nueva crisis financiera mundial, ¿qué opinás al respecto?
Segurísimo que viene otra crisis, porque no hemos corregido muchos de los abusos cometidos a inicios del 2000, pero Paraguay está bastante bien protegido. No me asusta. De hecho, si mirás la economía local en relación a la crisis que viven los dos vecinos (Argentina y Brasil), es impresionante, porque nos va bastante bien y eso es un buen ejemplo.
¿Cómo es que Paraguay está protegido?
Lo que es muy interesante en Paraguay y también es una ventaja, –porque protege el país–, es la poca conexión que tiene con el mundo financiero exterior. Casi un 80% de todas las financiaciones son locales, los depósitos de los bancos vienen de Paraguay y el otro 20% viene de afuera desde multilaterales o bancos de desarrollo, que dan financiación a largo plazo. Entonces, si se viene una crisis como la del 2008, cuando de un día a otro el mercado se cierra y los bancos no pueden encontrar más liquidez en los mercados financieros, en Paraguay eso no importa porque no somos dependientes de esto. En este sentido, creo que Paraguay está bastante protegido contra crisis internacionales de liquidez, porque generamos localmente suficiente liquidez para abastecer el sistema financiero; por supuesto, cuando hay una gran crisis, termina goteando a través de todas las redes y termina impactando a un país. Y la solución a esto es diversificar.
¿Qué particularidad encontraste en el sistema bancario nacional?
El cortoplacismo es lo que más me sorprendió en Paraguay. Noté que muchas empresas suelen desarrollar proyectos de infraestructura casi con sobregiros o con fondos a corto plazo. Pero esta política a veces no cuadra con el flujo. Hay una razón por la cual existen préstamos denominados Project Finance, que son líneas un poco más caras, pero se adecuan con el flujo de caja de la empresa, y explicar eso a los clientes al inicio y todavía ahora, es complicado. El mercado hipotecario es limitado porque los bancos no tienen los fondos a un plazo suficientemente largo para hacer préstamos inmobiliarios sin la ayuda de la AFD. Si esta desapareciera, ya no habría más préstamos inmobiliarios. Es cierto que casi triplicamos el plazo promedio en el banco, pero siguen muy cortos, alrededor de dos años, cuando tendrían que llegar a los 8 o 10 años para tener impacto en la financiación de infraestructura.
¿Y desde el punto de vista accionarial?
Me llamó la atención que el país tiene una economía que es 90 a 95% familiar, en el sentido accionarial. No tenemos un porcentaje de posición de empresas institucionales, son todas familias que montaron sus empresas y se dedican a varios rubros. Eso limita la flexibilidad de la economía. Tienen muy poca actividad en fusiones y adquisiciones entre empresas, todo queda en secreto, no hay mercado de capital por esa razón y eso limita también la capacidad de financiación. Son particularidades, pero también son ventajas, oportunidades, porque eso va cambiar un día.
¿Es una tendencia que los bancos sean más que una entidad de préstamos?
Creo que sí, entonces, siempre estamos buscando una forma de mejorar la experiencia para el cliente, eso puede ser facilitando sus transacciones, su interacción con el banco, que sea atendido por funcionarios capacitados y sepan qué productos cuadran con su necesidad. También puede ser con descuentos, con beneficios para nuestros clientes que viajan bastante. Al final del día, es mejorar la experiencia del cliente de acuerdo a su perfil.
¿Qué expectativas tenés con el Gobierno actual?
Desde mi punto de vista, lo más importante es tener una continuidad de lo que se estaba haciendo bien, y modificar lo que necesita algunos ajustes. Desarrollar los planes de inversión en infraestructura me parece correcto, el país los necesita. Además, precisamos una Transchaco así como el Corredor Bioceánico, ambos necesarios para el desarrollo del Chaco. Necesitan expertise en el manejo de la alianza público privada, que tenemos que aprender a través de proyectos más chicos. En todos los países que se introdujeron APP, demoraron entre tres a cinco años en establecerse.
En términos de leyes, para mí, lo más importante es tener una regulación de los fondos de pensiones, es clave, porque hoy somos 100% dependientes de las multilaterales para la financiación a largo plazo –a 20, 30 o 40 años– de los proyectos, cuando en realidad tendría que ser con los fondos propios que tiene el país. Tenemos muchísimos ahorros de pensiones que pueden ser utilizados con una regulación, con una política de inversión muy estricta. Sin eso no vamos a tener un crecimiento en infraestructura, porque hay una limitación natural en lo que se puede endeudar el país con las multilaterales, y capaz que dentro de dos o tres años, estas entidades se enfoquen en América Central o África, y nosotros qué vamos hacer.
¿Qué es lo que más te gustó de la cultura paraguaya?
Desde que me mudé con mi familia, en el 2011, encontramos que la gente es muy sociable, que genuinamente te acepta dentro de su círculo, te invita al almuerzo del domingo. Ese calor humano, que muchas veces el paraguayo no se da cuenta de lo fantástico que es. La gente dice que se quiere mudar a Estados Unidos, diciendo que es fantástico. Yo me mudé a Estados Unidos, y es un desastre. Quizás no es siempre fácil, pero mucho más fácil en comparación a los países en los que he vivido.
Sudameris en 2018
Este año estuvo cargado de innovaciones en Sudameris Bank, con una nueva identidad corporativa, el lanzamiento del programa LifeMiles en alianza con Avianca y la inauguración de un salón VIP en el Aeropuerto Silvio Pettirossi. Y más recientemente, el ingreso del Banco de Desarrollo Holandés que adquirió 7,5% de las acciones del Grupo Abbeyfield.
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