En nuestro país, la producción de trigo se concentra principalmente en los departamentos de Itapúa, Alto Paraná Sur, Caazapá y Caaguazú, influida por la presencia de molinos, aunque también se cultiva en menor escala en Canindeyú, San Pedro y Amambay. Este cereal se consolidó como un eslabón fundamental en el sistema de siembra directa, puesto que sirve como materia prima para la elaboración de harinas, panificados, pastas y otros productos alimenticios.
Hugo Pastore, director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), destacó para medios de prensa que el trigo está ganando terreno en la industrialización local, especialmente en la producción de fideos y galletitas.
Según Pastore, el trigo desempeña un papel crucial en la rotación de cultivos. "El productor cosecha soja y, dependiendo de los tiempos, siembra maíz o trigo. Este último, generalmente, se planta en mayo y es esencial para el sistema de siembra directa", explicó.
Mientras que en años anteriores se estima que el trigo alcanzó una producción anual de 1.800.000 toneladas, con una superficie de cultivo superior a las 600.000 hectáreas, en esta última campaña, se estima que la producción ronda de 1.300.000 toneladas, con una superficie de siembra de 370.000 hectáreas y un valor estimado de US$ 300 millones, considerando el precio actual de US$ 230 por tonelada.
Entre octubre y noviembre del 2024, se registraron envíos de 169.005 toneladas de trigo al exterior, un incremento significativo frente a las 51.321 toneladas del mismo periodo en el año anterior. Brasil acaparó el 98 % de las exportaciones, seguido por Bolivia y Vietnam.
La mejora en los volúmenes exportados responde tanto a una mayor producción (estimada en poco más de 1 millón de toneladas) como a la agilización en los puntos fronterizos. De enero a noviembre, los embarques generaron US$ 123 millones, superando en US$ 75 millones las cifras del mismo periodo del año pasado, según datos de la Capeco.
Pastore señaló que el sector agroindustrial está trabajando en el desarrollo de variedades resistentes a enfermedades y en la mejora de la logística de exportación. En este sentido, resaltó la necesidad de avanzar en la habilitación del Puente de la Integración, prevista para 2026, como una vía clave para fortalecer el comercio con Brasil, principal socio comercial del trigo paraguayo.
Con un panorama alentador y desafíos por enfrentar, el trigo sigue consolidándose como un pilar estratégico en la agricultura nacional y un motor para la economía.
Tu opinión enriquece este artículo: