Ante un panorama fiscal y económico complejo, González Acosta indicó que el principal mal de los últimos meses fue la falta de planificación para amortiguar los golpes externos.
- ¿Cómo ve al rubro de la construcción actualmente?
- Veo que este sector mantiene una situación estable. Hay que pensar que los proyectos de construcción en el rubro civil son de un año, dos años o incluso más. La dinámica es más general, a diferencia del combustible o algún producto de consumo, que al día siguiente ya te podés dar cuenta si es que aumentó o bajó el rendimiento.
- ¿Hay un incremento de precios en los insumos para la construcción?
- Evidentemente hay un incremento de precios en todos los rubros importados y en la mano de obra. La inflación subió a niveles que no acostumbramos. Vemos incremento en el acero, el hormigón, el aluminio, el vidrio y otros artículos importados.
Este es un fenómeno mundial que, en nuestro caso, se enfatiza por depender de la importación, el costo del combustible, la situación de los ríos y obviamente la inflación que supera el 4%, que es lo que manejamos anteriormente.
- ¿Cómo evalúa lo que pasó con el combustible?
- En primer lugar, hay una falta de estrategia y planificación. Todo el mundo sabía que el combustible iba a subir y no se le dio el tratamiento necesario. Ya se tenía que haber reflexionado y pensado con los diferentes sectores para que la suba del combustible no tenga un impacto brusco.
Si analizamos los cambios que se hicieron, podemos decir que no fue la mejor actuación desde el punto de vista estatal
- ¿Es únicamente responsabilidad del Gobierno la falta de planificación?
- En estos temas se necesita una política pública que se construya a partir del diálogo con transportistas, productores y los afectados que son los que utilizan el transporte público y compran el combustible. Cuando se deja de lado a una parte del conflicto se inician las asimetrías.
- ¿Qué es necesario para continuar con las inversiones en obras?
- Estamos en una especie de tormenta perfecta. Paró la economía con la pandemia, después vino la sequía, lo cual es mortal para un país dependiente de los commodities. El conflicto internacional, que impactó en el petróleo, por sobre todo, representó un golpe importante.
Para paliar los impactos se deben diseñar medidas sostenibles. Paraguay es un país pequeño y tiene la facilidad de responder política y económicamente más rápido que otros países. La crisis es global, en EE.UU. están viviendo una inflación tremenda. Para sobrellevar lo que ocurre realmente hace falta creatividad.
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